Uno de esos lindísimos paisajes que tiene Nicaragua es el volcán Masaya, es el lugar de citas para nacionales y extranjeros, turistas que desean ver de muy cerca como el coloso ubicado en el kilómetro 22 de la carretera a Masaya mantiene activa su caldera donde hay un lago de lava en permanente movimiento.
El volcán Masaya es uno de los siete volcanes activos que hay en Nicaragua, su última erupción la hizo en el 2008, se eleva a unos 635 metros sobre el nivel del mar.
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Este parque o área protegida comprende un área de 54 kilómetros cuadrados, las personas pueden ver desde largas distancias la emanación de gas de dióxido de azufre
Uno de los Lugares más bonito en Masaya
En este sitio hay dos volcanes y cinco cráteres, las personas pueden llegar en coche hasta la boca del volcán, pero antes pueden conocer su historia en un museo vulcanológico que se encuentra en el sitio.
Cuando los turistas extranjeros optan por visitar Nicaragua, dentro de su plan de paseo incluyen el volcán Masaya que, por las noches, tiene una linda vista.
Tanto los nacionales como los extranjeros, al llegar al sitio, lo primero que hacen es admirarlo y no pierden la oportunidad de tomarse la respectiva fotografía que les queda como recuerdo de la visita.
Muchas historias que contar del volcán Masaya
Este volcán fue bautizado como la boca del infierno, es que cuentan las leyendas que hace muchos siglos, los indígenas llegan a consultar a una bruja, por lo que en 1529 el misionero español Francisco de Bobadilla, optó por construir una cruz en lo más alto del sitio.
Cuenta la historia que un 13 de abril de 1538, el español fray Blas del Castillo bajó al volcán y con martillo en mano picó varias la lava que estaba convertida en roca, pensando que allí había oro. Ese intento de encontrar oro, fracasó.