Cada día son muchos los autobuses que ingresan al volcán Masaya procedentes de la república de Costa Rica, atraídos por las bellezas que tiene Nicaragua; entre ellas este cráter donde se arriman al borde del mismo y se puede observar lava ardiente.
El Volcán Masaya es uno de los ocho colosos activos que tiene el país centroamericano, y últimamente se ha convertido en el destino preferido de nacionales y extranjeros.
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«Yo no es la primera vez que vengo, ya lo he hecho en varias ocasiones, en Costa Rica tenemos varios volcanes, pero no llegamos tan cerca y aquí estamos en la cima»; manifestó Jenny Castro, oriunda del país del sur.
Este volcán tiene una latitud de 635 metros sobre el nivel de mar y de forma permanente emana gas de dióxido de azufre, por lo que en su alrededor hay poca vegetación.
Volcán Masaya el atractivo turístico de Nicaragua
Este volcán en su interior se mantiene incandescente debido a la lava persistente. Lo espectacular es por las noches cuando se puede ver en vivo y en directo.
«Nicaragua es muy lindo, me llevo una imagen de Nicaragua mucho más de lo que me imaginaba, (ustedes) están bendecidos tienen un país precioso«; manifestó el costarricense Sebastián Solano.
Cuando llegan a Nicaragua los costarricenses, tienen muchas opciones para ingresar, ya sea por vía aérea de San José hasta Managua o bien ingresando en vehículo a través de la frontera terrestre de Peñas Blancas.
Vía terrestre, se hacen incursiones en buses y se proponen visitar Granada la ciudad colonial, el Mirador de Catarina, y de paso, eligen el volcán Masaya ubicado a unos 22 kilómetros de Managua, capital de Nicaragua.
«En Costa Rica tenemos volcanes, pero aquí es diferente, la cercanía con el volcán, la experiencia, ustedes tienen una maravilla»; manifestó por su parte Iliana Castro, otra costarricense que llegó en una incursión el domingo 28 de enero del 2024.
Todos los fines de semana, se desarrollan actividades culturales entre ellas un zumbatón que organiza el ministerio de los Recursos Naturales, (MARENA); instancia que administra este parque que mide 54 kilómetros cuadrados