¿Qué ha pasado a un año de la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Nicaragua y la República Popular China? Este histórico acuerdo, que avanza a pasos agigantados, ha forjado aún más la unidad, desarrollo, prosperidad y futuro de ambas naciones.
Según el analista político Adolfo Pastrán, «A un año del TLC podemos ver resultados tangibles y demostrables. Las exportaciones de Nicaragua hacia la República Popular China han aumentado en un 80%, generando importantes ingresos al país, más oportunidades para el sector productor y más oportunidades laborales para los nicaragüenses.»
A partir de 2021, hubo un restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países. Esto ha permitido la firma de importantes acuerdos, memorándums de cooperación e inversión que se han visto fortalecidos de manera exorbitante con el Tratado de Libre Comercio.
Según Pastrán, «esta relación se elevó a nivel de asociación estratégica, y vimos diferentes firmas importantes a lo largo de 2024. Dichos acuerdos y proyectos ya están en marcha. Uno de ellos es la construcción acelerada de la Carretera Costanera, el nuevo Aeropuerto Punta Huete, el Puerto de Aguas Profundas de Bluefields, numerosas generadoras eléctricas de energía solar y demás proyectos en temas de salud, educación y cultura.»
Crecimiento de inversiones para Nicaragua
Nicaragua demostró la capacidad de convertirse en el «hub» de inversiones extranjeras chinas en Centroamérica, esto a través de la realización de la Cumbre Empresarial China-LAC en noviembre de 2024. Los beneficios y ventajas de la posición estratégica hacen que los empresarios chinos tengan en la mira a este país centroamericano; como el Centro de Operaciones más Importante para América Latina.
Si bien este tratado brinda oportunidades para que el producto nacional tenga acceso preferencial al vasto mercado chino, también la instalación de empresas chinas en Nicaragua, que según autoridades de la Asociación de Comerciantes superan las 800; permite que el consumidor final sea el más beneficiado económicamente, obteniendo productos de calidad a precios asequibles.
Este factor positivo de acceso a calidad y precio ajusta el presupuesto de pequeños empresarios como Xiomara Montiel, gerente propietaria de Baho, Sopas y Más «Los Tres». Ella asegura que, a 4 meses de su establecimiento; ha adquirido su cristalería en negocios chinos, lo que le ha permitido reducir costos en instrumentaria.
«Este tratado ha sido muy importante, ya que los negocios chinos se han establecido en nuestro país, dando a los pequeños emprendedores la oportunidad de poder adquirir a bajo costo los artículos. Por ejemplo, yo compré tazas y platos para brindar mis servicios de buffet a 30 córdobas el precio unitario, y en otros lados se cotizaba a 50 o 60 córdobas. Entonces, esto permitió extender mi presupuesto.»
Introducción de más productos de China
El equipamiento de este negocio con productos fabricados en China, que además, según Montiel, poseen una excelente calidad y detalles elegantes, ha permitido una buena aceptación de los clientes, lo que ha generado un crecimiento del personal en la pequeña empresa. Actualmente, se han producido 4 plazas laborales; aportando de esta manera a la economía familiar.
«Nosotros, como nicaragüenses, debemos pensar en las necesidades básicas dependiendo del rubro donde estemos invirtiendo y no pensar de una manera de que ‘se están apoderando’, sino que nos están dando la facilidad de que podamos emprender y desarrollarnos para poder tener oferta y demanda dentro del país, que a mí como emprendedora me permita desarrollarme, tener excelentes productos y seguir avanzando en nuestros negocios»; agregó Xiomara Montiel.
Desafíos y metas de 2025 para Nicaragua
Gracias al Tratado de Libre Comercio, Nicaragua pudo diversificar sus mercados. Ahora es parte de uno que posee más de 1,400 millones de consumidores; un sector donde muchos países quieren entrar.
Uno de los logros alcanzados es que la cuota de azúcar firmada durante el TLC era de 50,000 toneladas métricas por año, y esto se sobreproyectó, vendiendo cantidades superiores a las 70,000 toneladas. Es decir, que el azúcar nicaragüense es bien recibida por el mercado chino.
Además, se espera un mayor crecimiento para el sector tabacalero, cafetalero, bovino, el mercado del ron y los mariscos. Las expectativas se han superado gracias al trabajo realizado por el Gobierno Central para que los pequeños y medianos productores se preparen para competir con los estándares solicitados para un mercado que es exigente.
En cuanto a los proyectos de infraestructura vial, el analista político asegura que «necesitamos venderle más a China y China quiere venderle a América Latina a través de Nicaragua».
Desarrollo de proyectos
«Para eso, necesitamos tener mejores carreteras, más ampliadas. Es por esto que hemos visto el inicio de la tercera ampliación de Puerto Corinto, el puerto de aguas profundas en el Caribe y una terminal aérea que va a permitir que aterricen aviones de gran capacidad para atraer pasajeros y carga. Entonces, todo esto nos posiciona como un socio estratégico muy importante de China en la región centroamericana; y da un salto en la competitividad regional de Nicaragua.»
A esto se le suma el Sunny Fortune, la primera ruta comercial directa entre China y Nicaragua; que ahorra los tiempos de navegación y espera de los buques. Además, reduce los costos de fletes marítimos; mejora las cadenas de suministros y fortalece la integración del transporte multimodal.
