El sacerdote italiano Cosimo Damiano Muratori, expulsado de Nicaragua, fue detenido nada más llegar a Italia.
Se conoció por distintos medios internacionales, como MSN, Ill Mesaggero, o Tiscali Noticias; que efectivos policiales ejecutaron una orden de detención emitida por la Fiscalía de Perugia, dirigida por Raffaele Cantone; contra el religioso, ciudadano italiano de 79 años.
El hombre -que ya había sido condenado en 2019 y 2021 por un delito de agresión sexual agravada- fue beneficiario de una orden de prisión con relación a la cual deberá cumplir una pena total de cuatro años y seis meses de prisión con inhabilitación perpetua para cargo público.
Los hechos se remontan a 2009, cuando el clérigo -explica la fiscalía-, que trabajaba en Guatemala como referente de una organización no gubernamental católica, tras ofrecerse a ayudar a la víctima de entonces 29 años -conocida en Italia como parte de las actividades de la misma organización- a encontrar alojamiento, en varias ocasiones, la había obligado violentamente a someterse a actos sexuales.
Específicamente, el informe refiere que el degenerado cura la manoseba y le hacía que le tocara sus partes íntimas.
Prisión para cura por delito sexual
Tras la condena, el hombre de 79 años -que entretanto se había trasladado durante años en Nicaragua- fue expulsado de manera responsable por las autoridades de ese país, que a continuación repatriaron al hombre a Italia, informando al mismo tiempo a la embajada italiana en Managua.
Fue el miércoles por la tarde, que la oficina de la policía de fronteras aéreas de Fiumicino, junto con la brigada móvil de Perugia y la división Interpol de la dirección central de la policía criminal; detuvieron al hombre en el punto de desembarque y dispusieron su detención inmediata.
Este es el documento oficial del Tribunal sobre el caso del degenerado sacerdote italiano.
