Con el objetivo de continuar impulsando una conciencia ambiental y fortalecer la educación a través del conocimiento de los recursos naturales de nuestro país y cómo protegerlos, estudiantes del colegio Barrilete de Colores participaron en el proyecto de Escuelas Flotantes en colaboración con Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) en el lago Xolotlán.
«Este año vamos a tener la oportunidad de acompañar a más de 40 niños del colegio Barrilete de Colores. Ya tenemos un trabajo con más de 299 estudiantes de los grados cuarto, quinto y sexto; quienes han participado en diferentes visitas a lagunas y a nuestros recursos naturales en el municipio de Managua», afirmó Jennifer Porras, secretaria del concejo municipal de la Alcaldía de Managua.
Por su parte, Tomoyuki Odani, representante del JICA, aseguró que en esta iniciativa existe un trabajo articulado de las instituciones gubernamentales en pro del mejoramiento del lago.
«Queremos que el lago Xolotlán sea como el lago Biwa, donde la gente pueda venir a nadar y disfrutar cada fin de semana, navegando con una calidad mucho mejor que la actual. Por esto se unen a esta gran iniciativa la Alcaldía de Managua, el Ministerio de Educación y Marena», comentó Odani.
Colaboración con la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA)
Esta actividad se realiza como parte de una experiencia inspirada en el lago Biwa, uno de los más grandes en Japón, que hace 50 años inició un proceso de saneamiento y actualmente abastece de agua potable a más de 12 millones de personas; incluidos los pobladores de la ciudad de Osaka.
«Este lago es como un espejo para nuestras casas y debemos cuidarlo para que siempre esté limpio y saludable. En nuestras clases de educación ambiental hemos aprendido muchas cosas interesantes. Sabemos que este es el segundo lago más grande de Centroamérica y que es muy importante para nuestra comunidad»; aseguró Samuel Varela, estudiante de cuarto grado en el colegio Barrilete de Colores.
Estos niños se aventuraron en la embarcación Momotombito, y en este recorrido de cuatro horas conocieron la ubicación de la planta de tratamiento de residuos sólidos y aguas residuales. Además, con la asistencia del Centro para la Investigación en Recursos Acuáticos de Nicaragua (CIRA); realizaron experimentos a través de microscopios y telescopios, para finalizar con un intercambio de conocimientos sobre lo aprendido.