Don Marcelo, donde el buen sabor enamora hasta al más exigente paladar

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Foto: Don Marcelo, donde el buen sabor enamora hasta al más exigente paladar/ TN8

Como cada viernes es mi deber mostrarles lo bueno que hay en el Puerto Salvador Allende y hoy no será la excepción. Hace más de un año que no visitaba el kiosko «Don Marcelo, Sabor y Son»; siempre pasaba de larguito durante mis visitas al centro turístico más visitado de toda la capital.

Pero en fin; hoy decidí quedarme y verificar que todos los cambios que se observan de verdad han servido para superar la atención y servicio que ya era muy buena desde antes. Cambios como la iluminación, las terrazas y música en vivo llaman la atención; y atraen a los clientes que pueden disfrutar de un excelente ambiente y un inmejorable clima que cualquiera disfruta de la estancia.

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Foto: Don Marcelo, donde el buen sabor enamora hasta al más exigente paladar/ TN8

Ahora sí; entremos en materia. La comida es excelente y tiene un toque distinto que sin duda ha mejorado en cada platillo. Lo que más sale de la cocina, para variar y que no puede faltar en ningún restaurante; son unas buenas alitas. Aquí te las sirven con una orden de papas fritas que en cantidad supera a cualquiera y te las acompañan con una buena salsa barbacoa; sea picante, salsa rosada e incluso un buen aderezo. ¿A quién no le fascina algo de esto?. Todos acaban chupándose los dedos.

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Además, ofrecen churrascos, puyazos, carnes asadas, fajitas, ensaladas, quesadillas, camarones; algunos cortes de pescado e incluso platos para los reyes del hogar. Hablando de bebidas, hay variedad de refrescos naturales, bebidas gaseosas, varios tipos de té y no pueden faltar las cervezas nacionales y extranjeras; además de todos los tipos de rones que tenemos.

«Don Marcelo», ¡no cierra!, así es, leyeron bien, no cierra sus puertas. De lunes a jueves abre a partir de las cuatro de la tarde, los viernes inician labores a las tres, sábado a las dos de la tarde; y el domingo encienden la cocina desde las doce del medio día. Lo que si es que tienen en común es; que todos los días cierran hasta que el último cliente se vaya.

Visitar «Don Marcelo»; es una experiencia de esas que nadie se arrepiente y que se desea repetir. Buen ambiente, buena comida, excelente atención, sabroso clima y vista privilegiada.

Nota elaborada por: Julio Cruz.