Un sismo con epicentro en el lago Xolotlán, con una duración de 30 segundos y una magnitud de 6.2 en la escala Richter, dejó completamente devastada a Managua el 23 de diciembre de 1972, convirtiéndose en uno de los terremotos más potentes del país. Más del 60 por ciento de las viviendas y edificios quedaron destruidos, y alrededor de 10,000 personas fallecieron, mientras que 20,000 resultaron heridas.
En conmemoración del 51 aniversario del terremoto, la Alcaldía de Managua realizó un homenaje e imposición de ofrendas florales para honrar la memoria de las víctimas de esta tragedia que enlutó los corazones de los nicaragüenses y del mundo entero.
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Los homenajes se llevaron a cabo con una cantata e imposición de ofrendas florales en el monumento erigido en memoria de las víctimas de la catástrofe y en la fosa común donde reposan los restos de miles de capitalinos que fallecieron durante la tragedia y no fueron identificados.
La Alcaldesa de Managua, Reyna Rueda, recordó este episodio de tristeza que azotó el país
“Un día como hoy en 1972, ya estábamos esperando la Navidad en nuestro país. Muchas familias en ese momento sufrieron ese terremoto en el que 10,000 hermanos y hermanas perdieron la vida. Eso es triste realmente para nosotros, pero les hacemos este homenaje recordando y acompañados de compañeros que sobrevivieron a ese episodio triste de ese terremoto, donde se destruyó prácticamente el 90% de nuestra ciudad.”
“Soy una de las sobrevivientes de esta catástrofe del terremoto. Fue una situación bastante escalofriante debido a que no se contaba con las orientaciones que hoy en día se nos brindan. Es nostálgico recordar cómo las viviendas colapsaban, numerosos niños, niñas y adultos mayores quedábamos sin hogar. Pero hoy en día la situación es otra gracias al Gobierno del Presidente de la República Daniel Ortega, ya que se ejecutan simulacros multiamenazas para estar preparados ante cualquier eventualidad”, expresó Ramona Mairena, sobreviviente al terremoto de 1972.
En honor a las víctimas de aquella tragedia, familiares y autoridades gubernamentales se reunieron en el cementerio de Managua para rendir homenaje a los difuntos. Flores frescas y coronas adornaron los sepulcros, simbolizando el amor y el respeto hacia aquellos que perdieron sus vidas hace más de cinco décadas.
“Hoy estamos cumpliendo 51 años de la destrucción de aquella Managua linda producto del trágico terremoto del 1972 que dejó más de 10,000 muertos. Nos encontramos en el Cementerio General de Managua rindiendo tributo a los compañeros nicaragüenses que perdieron sus vidas”, comunicó el Vicealcalde de Managua, Enrique Armas.
Este acto simbólico representó el amor y la memoria eterna hacia aquellos que perdieron sus vidas en aquel fatídico día, y la promesa de que nunca serán olvidados.
