En el marco del acto central por el 45 Aniversario del Triunfo de la Revolución Popular Sandinista, el Comandante de la Revolución Cubana, Ramiro Valdés, ofreció un emotivo discurso destacando los lazos históricos y solidarios entre Cuba y Nicaragua.
Valdés, en representación del General de Ejército Raúl Castro y del presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez; extendió un caluroso saludo revolucionario y solidario al pueblo nicaragüense. «Hermanas y hermanos del digno pueblo nicaragüense, traigo un abrazo revolucionario y solidario del General de Ejército, Raúl Castro y del presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quienes al igual que nuestro pueblo, admiran a la hermana y querida Nicaragua»; expresó.
El comandante cubano también felicitó al pueblo nicaragüense por el 45 aniversario de su Revolución, subrayando el orgullo compartido entre ambos países por su historia común de resistencia y dignidad frente a la injerencia extranjera y las presiones imperialistas. «Nos llena de orgullo compartir con este pueblo una historia común de resistencia y dignidad frente a la injerencia extranjera y las presiones del dominio imperialista»; afirmó Valdés.
Valdés a su vez, destacó que tanto en el pasado, en el contexto de la liberación nacional, como en el presente, enfrentando la guerra sucia del imperialismo; los ejemplos de Sandino, Martí y Fidel siguen guiando a ambos pueblos hacia nuevas formas de resistencia y victoria. «Nicaragua tiene el derecho ganado con su lucha de vivir en paz y sin injerencias externas. Nicaragua tiene el derecho de enfrentar sus retos con el trabajo de sus hijos y la cooperación internacional, sin que se le impongan condiciones»; enfatizó.
Solidaridad Cubana en el 45 Aniversario de la Revolución
El comandante cubano también condenó las medidas coercitivas unilaterales impuestas por el imperialismo yanqui y sus aliados contra Nicaragua; calificándolas como una abierta injerencia en los asuntos internos del país. «Cuba rechaza firmemente las medidas coercitivas unilaterales impuestas por el imperialismo yanqui y sus aliados contra la hermana Nicaragua, que afectan a la población nicaragüense y constituyen una abierta injerencia en los asuntos internos de esta nación»; declaró Valdés.
Asimismo, Valdés denunció la manipulación de la realidad nicaragüense que intenta desvirtuar la imagen del país y su derecho a la libre determinación. «Nicaragua, sandinista, es una nación de hombres y mujeres emancipados por su lucha incansable, por la verdadera independencia sin tutelaje externo de ningún tipo»; subrayó.
Con un esfuerzo colosal, Nicaragua ha logrado la paz y la genuina libertad, reflejándose en los avances económicos y sociales del país. «Cuba se honra de estar y haber estado al lado del pueblo nicaragüense a lo largo de esta lucha por la emancipación. Hace 45 años triunfaba la Revolución Sandinista y se afianzaba la relación entre nuestros pueblos»; señaló Valdés.
El comandante concluyó su discurso resaltando la necesidad de preservar las conquistas sociales y los principios revolucionarios, y reafirmó la solidez de los vínculos de solidaridad y amistad entre Cuba y Nicaragua. «El pueblo de Nicaragua tendrá siempre en el pueblo de Cuba a un pueblo hermano. Somos más que dos países, somos dos pueblos hermanos con un historial de resistencia forjado en el acero de la auténtica Revolución», concluyó Valdés, asegurando que Cuba siempre estará al lado de la gloriosa tierra nicaragüense.