En Managua existe un lugar en donde pueden ser tratados de forma gratuita e integral personas con adicciones. Conozcamos un poco del trabajo desarrollado por las autoridades para ayudar a las personas a salir de esta enfermedad.
Carlos Francisco Castro llevaba 4 años sumido el mundo de las adicciones. Un día consideró necesario que tenía que cambiar por su bien y por amor a su familia, y desde hace un mes inició la lucha, pues es tratado en el Centro de Adicciones Valentín Méndez.
«La atención ha sido bastante excelente, nos ayudan ante cualquier cosa que necesitemos, cualquier inquietud. Ante cualquier problema siempre están de la mano para brindarnos sus servicios profesionales y también su calor humano«; dijo el joven capitalino.
Este martes en ese lugar se realizó un encuentro entre los pacientes que son tratados en ese lugar y sus familiares, cuyo apoyo es fundamental para lograr superar esta enfermedad por la cercanía con los pacientes fuera de ese centro.
Red de apoyo para combatir las adicciones
«La finalidad es establecer una red de apoyo con los familiares para que ellos nos ayuden en este proceso de rehabilitación. La finalidad es que ellos sepan cómo actuar en los momentos en que los pacientes estén con ansiedad, que los pacientes estén con insomnio y para que los acepten, para que no los molesten y sea lo contrario, que ellos sean una red de apoyo importante en las recuperaciones, en la rehabilitación«; explicó la trabajadora social en salud Luz Marina Vargas.
En ese lugar, un grupo de profesionales altamente calificados en diversas áreas brindan atención ambulatoria, gratuita y de calidad para quienes llegan con las mentes atribuladas; pero el corazón lleno de esperanza para superar las adicciones.
«Nosotros diario atendemos demandas espontáneas, el paciente que viene a buscar de nuestra ayuda, con toda disponibilidad y humanismo, se les da una atención con calidad y calidez a nuestros pacientes. El día que ellos vienen nosotros los ingresamos, les damos sus tratamientos psicológicos, sus terapias»; refirió la trabajadora social.
Para ingresar a ese lugar únicamente se debe representar la cédula o algún documento de identidad. Pero sobre todo las ganas de superar esas adicciones que lo único que hace es destruir al individuo, a la familia y la sociedad.