En un ambiente lleno de alegría y unión, numerosas familias nicaragüenses se congregaron en el Parque de la Alegría para conmemorar el espíritu navideño este 25 de diciembre. Con risas, música y actividades festivas, este espacio se convirtió en el punto de encuentro para personas de todas las edades y trasfondos culturales.
Desde tempranas horas de la mañana, se percibió un ambiente festivo, donde se observaban a niños emocionados participando en juegos y disfrutando de las atracciones dispuestas especialmente para ellos.
«Esto es algo genial, superdivertido y único para disfrutar con los pequeños de la casa. Sin duda alguna, sentimos esa adrenalina en este juego de las tazas; gritábamos, gozábamos y vivíamos el momento ambos. Agradecerle también al Gobierno del presidente Daniel por haber realizado este parque de diversión», comentó Martha Gaitán, visitante de Masaya.
«Somos de Matagalpa y nos venimos a conocer este lugar que, sin duda, es algo único; era lo que le hacía falta a Nicaragua y lo más importante es que los precios son súper asequibles al bolsillo de los nicaragüenses», indicó Reynaldo Martínez.
Ambiente festivo en el Puerto Salvador Allende
Los asistentes, con sonrisas radiantes, compartieron momentos de convivencia, intercambiando experiencias y tradiciones propias de esta fecha especial. Música folclórica y villancicos resonaban en cada rincón, añadiendo un ambiente festivo al día.
«Es un momento para unirnos como comunidad y celebrar la alegría de la Navidad», expresó María González, una madre de familia que acudió al parque con sus hijos. «Es hermoso ver cómo todos compartimos y disfrutamos este día juntos».
La diversidad de actividades organizadas por las autoridades del parque brindó entretenimiento para todos los gustos, desde espectáculos en vivo hasta juegos tradicionales.
El Parque de la Alegría se ha convertido en el epicentro de la unión familiar y la celebración colectiva. Esta jornada quedará marcada en los corazones de quienes compartieron la magia de la Navidad en este emblemático lugar de encuentro comunitario.
