Los productores de Nicaragua resaltan que hay algunas afectaciones por la abundancia de las lluvias, sin embargo, explican que en la mayoría de productos; permite que la planta se desarrolle y se obtenga una excelente cosecha.
Alberto José Amplíe, campesino de Ticuantepe, destacó que en el caso de los frijoles, las hojas de la planta se ponen amarillas con tanta lluvia y que es necesario el sol; pero que hay otros productos como granos básicos a los que el agua les ayuda a desarrollarse.
«Estamos contentos con las lluvias, porque les ayuda a nuestros cultivos y esperamos tener una buena cosecha»; manifestó el productor Alberto Ampié.
Otros productores de ese mismo municipio que corresponde a Managua, destacaron que es una bendición de Dios cada gota de agua que cae; porque esperan que las plantas terminen de crecer y desarrollarse.
Agua bendita para Nicaragua
Noviembre es considerado por estos campesinos como el último mes de las lluvias, por lo que tienen fe en que Dios les mandará el agua.
El pronóstico de estos productores es que antes del 15 de diciembre; ya estén cosechando toda la siembra de postrera.
Incluso, hay muchos que se dedican a la siembra de piñas y a mediados de noviembre esperan cosechar esa fruta. A todos les va muy bien, afirman.
Además de los granos básicos de Nicaragua como arroz, frijoles, maíz, sorgo, estos campesinos también siembran pitahaya y piña, papaya, melones, sandías y otras frutas que son trasladadas a los mercados para el consumo local.
Aprovechando que la tierra es muy fértil, también siembran plantas medicinales que les ayudan a curar sus enfermedades. Además, siembran chile y chiltoma.
Nicaragua es un país altamente productivo, el consumo nacional depende de la producción que se desarrolla tanto en la siembra de primera de mayo a agosto y postrera de agosto a diciembre; aunque en algunas zonas del país, se da la siembra de apante, sobre todo en aquellas zonas lluviosas como Nueva Guinea en el Caribe sur de la nación.