Con mayoría parlamentaria, se aprobó este lunes en Nicaragua la ley de defensa de los derechos del pueblo, que tiene como espíritu fortalecer la soberanía y autodeterminación para la paz.
De acuerdo a la exposición de motivos, compartida por la diputada Loria Dixon, el objetivo es que prevalezca el principio constitucional de la independencia, la democracia y la autodeterminación nacional, así como la no injerencia en los asuntos internos del pueblo nicaragüense.
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“Los nicaragüenses que encabecen o financien un Golpe de Estado, que alteren el orden constitucional, que fomenten o instalen a actos terroristas, que menoscaben la independencia, la soberanía, la autodeterminación y que inciten a la injerencia extranjera en los asuntos internos, no podrán optar a cargos de elección popular”, expuso Dixon.
En la sesión extraordinaria se aprobó con 70 votos.
"Las prohibiciones para optar a cargos de elección popular existen tanto en la Constitución Política de la República de Nicaragua, como en el resto del ordenamiento jurídico nicaragüense, el artículo 147 de la Constitución Política señala la prohibición de optar a la presidencia de la república a todo nicaragüense que encabece o financie un golpe de Estado, que altere el orden constitucional. De igual forma, la legislación penal señala que quedan limitados los derechos políticos de los nicaraguenses que incurran en actos contrarios a la Constitución Política", sostiene la exposición de motivos compartida por la diputada Dixon.
Protección de la soberanía
"Esta iniciativa de ley tiene su fundamento en el principio constitucional del artículo 1, que destaca la independencia, la soberanía y la autodeterminación nacional como derechos irrenunciables del pueblo y fundamentos de la nación nicaragüense”, indica.
Toda injerencia extranjera atenta contra la vida del pueblo.
"Esa es la fundamentación de esa iniciativa, el que diga que venga la intervención, es un delito por traición, los tranques de la muerte, eso es terrorismo, el pueblo tiene derecho a defenderse", indicó Gustavo Porras, presidente de la Asamblea Nacional.
"Una ley fundamentada en la Constitución, es leer sin entender, pretenden derramar en la patria, sangre de hermano, venir a justificar ese derramamiento de sangre con acciones terroristas, la constitución y las leyes son las cristalinas claras. Esta ley está totalmente acorde al sistema jurídico, derechos políticos para todos los y las ciudadanos nicaragüenses", sostuvo el diputado Edwin Castro.
