Nicaragua expone modelo de atención a la familia con el paso del huracán Iota

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El devastador ciclón Iota, el más poderoso de la temporada de huracanes 2020 ha sido uno de los más fuertes que ha golpeado a Nicaragua y Centroamérica, pero también permitió demostrar la capacidad organizativa para atender las eventualidades.

Con todo lo sucedido y los daños de los fenómenos naturales, el ministro-director del Sistema Nacional de Prevención y Atención ante Desastres, SINAPRED, Guillermo González, brindó detalles a la cadena de noticias TeleSUR.

 

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El huracán Iota impactó como categoría 5 y en la actualidad es una depresión tropical que transita por El Salvador, pero a su paso dejó una estela destructiva. 

"Estamos a 36 horas de que Iota ingresó a territorio nacional, lo hizo en categoría 5, luego fue degradándose hasta que salió paulatinamente como tormenta tropical", expresó el funcionario. 

El SINAPRED logró evacuar a tiempo gran parte de la población de las zonas en riesgo, mostrando así la preparación en la mitigación y prevención ante las eventualidades del peligro inminente. 

"Los efectos comienzan a quedar un tanto más claro, hay daños en infraestructura social, caminos, árboles, caminos, la crecida de los ríos de las zonas, desde ayer, las familias ya comenzaron a hacer limpieza", indicó el ministro-director. 

"En las zonas montañosas, se calcula que cayó alrededor de 300 milímetros", expresó a la cadena TeleSUR.

"Hemos tenido inundaciones importantes, los efectos han venido variando, seguimos con la alerta roja en la zona que impactó el huracán y el resto del país lo tenemos en alerta amarilla", informó. 

"Hay un esfuerzo desde las 48 horas antes, se movilizaron más de 68 mil personas a los albergues y se está en ese proceso de atender a las familias", puntualizó. 

"Todo el país está involucrado en los efectos directos e indirectos, se trabaja en la recuperación, estamos pendientes con la población, trabajando", aseguró. 

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Foto: Informe de afectaciones de Iota en Nicaragua / TeleSUR

Acción temprana 

"Ha sido un trabajo intenso por la forma de trabajo porque está basado en un protagonismo", detalló. 

"Se actuó de manera temprana, con una participación activa con las familias, con más de 40 mil compañeros de las instituciones", remarcó. 

Iota provocó el aumento de los caudales de ríos en las tres regiones de Nicaragua. 

"Los principales ríos rápidamente subieron su nivel, de ahí la urgencia de ubicar a las familias", sostuvo. 

"Se tiene que trabajar y estar organizados para que tengamos esa capacidad de movilizarnos, nos concentramos en garantizar la vida de las familias, esta movilización ya contó con un cambio de mentalidad que ha venido logrando, pero con una enorme capacidad de despliegue, que se abocan a una tarea", dijo el funcionario. 

"El ya tener alimentos y avituallamiento, para atender rápidamente a la familia, igual el restablecimiento de los servicios básicos”, valoró.

Ofreció detalles de la cantidad de personas que se encuentran albergadas en la zona del impacto del ciclón. 

"La cifra se acerca a los 70 mil evacuados, lo importante es la combinación de un modelo de la población preparada con un Gobierno que invierte en hacer acciones de carácter preventivo", enumeró. 

Ahora el país se concentra el siguiente escenario que ve la fase de reparación a los daños. 

"Ya pensamos en actuar en la recuperación, desde el nivel local y nacional", adelantó.