Desde hace 31 años, Meyling Melania Ruiz ha aportado su granito de arena a la transformación de la sociedad nicaragüense, las aulas de clases han sido los espacios en los que ella ha abonado a la construcción de una mejor Nicaragua.
En honor a la mujer nicaragüense queremos destacar la experiencia de esta docente que se desempeña en el sistema público de educación, para quien ha sido una experiencia extraordinaria ayudar en la formación de grandes profesionales.
"A uno le llena de mucha satisfacción porque dice que bueno, aporte en algún momento ese granito de arena. Conozco de muchos muchachos a quienes yo les di clases que hoy en día son médicos, ingenieros, ingenieros químicos, periodistas, enfermeras, maestros; tengo varios colegas que cuando vamos a los encuentros, a las capacitaciones, siempre dicen ella me dio clase, ella fue mi maestra", expresó Meyling Melania Ruiz.
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Madre, esposa y maestra son algunas de las capacidades que pueden desarrollar exitosamente las mujeres y encontrar en esos fundamentales roles un sentimiento de bienestar o placer, como el caso de Meyling Ruiz.
"Nosotras hemos sido privilegiadas con un cerebro que nos permite hacer varias cosas a la vez y entonces nosotras las mujeres creo que somos madres, somos esposas, somos hijas, somos enfermeras, somos maestras, es que somos de todo y Dios nos ha dado esa sabiduría para poder ejercer ese papel y poder ser esa ayuda idónea que él nos demanda", destacó.
La confianza en sí misma, en su fortaleza y habilidades le permiten a la mujer ser uno de los pilares más importante en la familia y la sociedad, en la historia de Nicaragua la mujer ha sido clave en los procesos y se les reconoce esa capacidad de entregar su máximo esfuerzo.
Meyling Ruiz no duda de la fortaleza que caracteriza a la mujer nicaragüense y exalta su habilidad para alcanzar sus metas.
"Yo quiero decirle a todas las mujeres de Nicaragua que sí se puede, que podemos lograr todo lo que nosotros queremos; siempre y cuando nuestras metas estén en manos de nuestro Señor, en manos de nuestro Dios, nosotros podemos lograr todo lo que nosotros nos proponemos", señaló.
El amor hacia sí misma como algo esencial debe ser cultivado por cada mujer, un consejo que la maestra Meyling invita a poner en práctica.
"Las primeras que nos debemos valorarnos, debemos querernos, debemos de amar somos nosotras mismas, debemos de pensar en nosotras mismas, llenarnos a nosotras mismas", enfatizó esta maestra.
En Nicaragua se reconoce el papel que la mujer ha desempeñado en los procesos sociales y políticos, y desde todos los ámbitos se trabaja para garantizar su integridad y el cumplimiento de sus derechos.
