Un estudio en 32 países de América Latina y Caribe sobre casos de femicidio reveló que Nicaragua es la nación de Centroamérica con menos casos.
El Salvador puntea con 6.8, le sigue Honduras con 5.1, Costa Rica 1.0, Panamá 1.0, mientras que Nicaragua está con 0.7 por cada 100 mil mujeres.
Se trata de la medición regional de femicidio que realizó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
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La información reveló que en 33 países la cifra de mujeres asesinadas solo por el hecho de ser mujeres superó los 3 mil 800 casos.
¿Qué está haciendo Nicaragua?
“La educación es fundamental y es tema que estamos trabajando y por eso yo mencionaba el tema de la educación inclusiva, porque este es un tema de educación y coordinación, así como de trabajo de género, pero cómo lo tratamos desde la familia, por eso estamos comprometidos con el programa que se ejecuta en el campo porque llegan a las comunidades que permiten desarrollar la educación”, dijo Ramona Rodríguez, presidenta del Consejo Nacional de Universidades y rectora de la UNAN-Managua.
“Nosotros estamos en primer lugar en esos índices bajos, no solamente de femicidio, sino también de homicidios, en las estadísticas son claras mientras en Honduras por cada 100 mil habitantes hay 47 homicidios, en El Salvador 26, en Guatemala 21, ahí cerca Costa Rica 11, Nicaragua tiene 7; y el femicidio es igual, esto tiene que ver con la cultura de paz, con el trabajo que las iglesias están haciendo, con el trabajo que el Gobierno está haciendo y las familias están haciendo", explicó el pastor Miguel Ángel Casco.
"Esto no es una obra de magia, esto es producto de un trabajo que se hace en el hogar, en las escuelas, en las iglesias, los centros de trabajo y en una línea de Gobierno donde la paz está como un principio fundamental”, agregó Casco.
“Cuando hablamos de femicidio es preocupante, pero se han venido ejecutando programas que inciden en la mujer, entonces de alguna manera u otra la dependencia económica ya no es tanto del hombre que eso influye, el maltrato psicológico, ahora ya las mujeres se están involucrando en el autoempleo y eso mejora la calidad de vida, porque ya no están dependiendo del esposo porque generan su propio ingreso”, dijo Carolina Torrez, de la organización de mujeres con discapacidad de Chinandega.