Al Cementerio Periférico acudieron niños y niñas del Centro de Desarrollo Infantil Mildred Abaunza a honrar a la mártir de la revolución, en cuyo homenaje lleva su nombre esa institución.
Con flores elaboradas por ellos mismos, los niños y niñas del CDI fundado en 1981, acudieron al campo santo para honrar la tumba de la guerrillera que fue asesinada por la guardia Somocista hace 44 años.
“Nuestro centro lleva su nombre y ella fue una luchadora, una trabajadora social, que se unió a las filas del Frente Sandinista y dio su vida y nosotros estamos enseñándole a nuestros niños para que conozcan sobre nuestros héroes nacionales”, explicó la maestra Vilma Moreira.
Ante la tumba, los estudiantes cantaron para demostrar la alegría de vivir en paz, sueño por el que luchó Mildred y otros revolucionarios que derramaron su sangre por un mejor país.
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“Ha sido un ejemplo y una inspiración para todos los nicaragüenses la vida de Mildred, que tan jovencita dio su vida por amor a su patria y porque nuestro país tuviera estas nuevas generaciones en paz y libertad en los centros de desarrollo infantil”, dijo la directora del CDI, Antonia Varillas, en el que se atienden 170 niños en edad temprana y educación preescolar.
Originaria de Bonanza, la guerrillera Mildred Abaunza cayó en combate el 4 de febrero de 1976. Tenía apenas 25 años cuando ofreció su vida para que en Nicaragua se alcanzara el bienestar y la justicia social.
La joven, junto al Comandante Tomás Borge y otro compañeros fueron detectados en el parqueo del grupo «J» de la Colonia Centroamérica, en Managua, por una patrulla de la Guardia Nacional.
Se inicia un intercambio de disparos en donde resulta muerto el jefe de la patrulla y Mildred es herida de gravedad. Le pide a los compañeros que traten de escapar, mientras ella cubría la retirada de ambos, pero cayó bajo las balas de los esbirros Somocistas.
