El fin era trabajar duro para gozar de una vida mejor y por esta razón decidieron probar suerte saliendo de nuestro país, con lo que no contaban 100 hombres y 4 mujeres es que serían deportados por las autoridades migratorias de Estados Unidos.
Relatan que pasaron por muchas dificultades, sin embargo a su llegada este miércoles en el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, fueron recibidos con alimentos y medicina por funcionarios de la Dirección General de Migración y Extranjería, Ministerio de Salud y Ministerio de la Familia.
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"En nombre del comandante y presidente Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo sean bienvenidos a traves del Ministerio de Familia. Nos han designado la tarea de entregarles una ayuda económica de 300 córdobas, un refrigerio y se les va a llevar a sus diferentes terminales. Afuera están a disposición dos buses", dijo Jezreel Silva Mendoza, analista en atención familiar de MIFAN.
El vuelo que trasladó a los indocumentados llegó a Nicaragua a las 11:40 de la mañana de este miércoles; a las afueras del aeropuerto familiares esperaban ansiosos.
Los deportados comunicaron a la ciudadanía a no salir del país, dado que en Nicaragua se goza de paz, libertad, tranquilidad y seguridad.
"Me parece bien, perfecto como nos reciben. Cuatro meses estuve allá y fue un calvario, vamos a ver qué nos prepara el destino acá. Soy de Chontales", dijo Rafael Hurtado Reyes, quien se emocionó mucho al llegar a su tierra.
"Ya estamos en el país de nosotros, en la cultura de nosotros. Gracias a Dios regresamos bien y vamos a seguir adelnate luchando, que bien que nos den este recibimiento como hermanos que somos. No le hemos hecho mal a nadie, pasé 20 años allá, mi familia ya está esperando", dijo Ernesto Meza, originario de Estelí.
Ahora en su patria con la ayuda de Dios e inspirados en su familia, prometieron comenzar de cero buscando un trabajo que les brinde un mejor estilo de vida.