El comandante Julio Buitrago marcó las páginas de la historia de Nicaragua. Su asesinato lo convirtió en un héroe nacional, que nunca claudicó en sus ideales centrados en la liberación de Nicaragua, que en aquel entonces fue testigo de cómo el pueblo sufría por la Dictadura Somocista.
Este lunes 15 de julio son 50 años de su entrega de amor por el suelo pinolero, tras morir en 1969 durante el ataque que la Guardia Nacional efectuó en contra de la casa de seguridad que el FSLN tenía en el barrio Frixione, conocido también como barrio Maldito, en Las Delicias del Volga, Managua.
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Según el papá del comandante, Julio José Correa, su hijo quería que Nicaragua fuera libre de pobreza, hambre y siempre se opuso a los asesinatos atroces que se cometieron durante el mandato de Anastasio Somoza, y que hoy que se conmemora su muerte, estaría feliz por la transformación de la nación, que es posible por las obras desarrolladas por el Presidente de la República, Daniel Ortega.
"Luchó contra la pobreza, con tantas cosas que hacía Somoza, tanto crimen, quitando propiedades y todas esas cosas. Todo eso lo tomó en cuenta y por eso se metió a eso. Se metió para liberar su pueblo y por él dio su vida", dijo Don Julio.
La trayectoria revolucionaria de su vida
El Padre de la Resistencia Urbana, nació en Managua un 12 de agosto de 1944. Fue un estudiante de excelencia académica, y uno de los fundadores del Movimiento Juventud Patriótica Nicaragüense.
En 1959 denuncia una elevado índice de analfabetismo. A los 16 años se integra al Frente Sandinista de Liberación Nacional, llegando a ser parte de su Dirección Nacional.
Estuvo presente para el primer aniversario de la masacre estudiantil del 23 de julio en León para el año 1960.
Este 15 de julio, una vez más el pueblo sandinista rinde honores a un gran revolucionado que con su ejemplo y valentía, se logró años más tarde el Triunfo de la Revolución Popular Sandinista, que en este 2019 se celebran 40 años.
"Para toda la juventud, que siga su ejemplo. Él era un buen muchacho, un buen hijo, un hombre que amó a su patria y a su prójimo. Hoy estuviera alegrísimo y tranquilo", finalizó diciendo Don Julio, quien siempre recuerda la gesta heroica de su hijo Julio Buitrago.
