En los últimos cinco años se ha disminuido la muerte de mujeres a causa del cáncer cérvico uterino, como resultado de la oportuna detección de la mortal enfermedad en Nicaragua, informó el secretario general del Ministerio de Salud, Dr. Carlos Sáenz.
Hace más de una década esta enfermedad representaba una de las situaciones más trágicas en las familias nicaragüenses por los enormes costos del tratamiento y porque en muchos casos era detectado en etapa terminal, condenando a la muerte a muchas mujeres, sin oportunidad de vencerlo.
“Se ha disminuido la mortalidad por cáncer cervicouterino, pasando de 18.3 en el 2014 a 14.3 por cada 100 mil mujeres en el 2018. Este logro se ha alcanzado gracias a la voluntad política del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional”, manifestó el Dr. Carlos Sáenz.
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Por otra parte, el cáncer de mama ha cobrado menos vidas en Nicaragua a raíz de la permanente campaña contra esta enfermedad, que desarrolla el sistema público de salud.
“Actualmente tenemos una tasa de 19.3 por cada 100 mil mujeres, estamos dirigiendo el incremento de la toma de mamografía en las unidades de salud, en especial a las mujeres mayores de 50 años”, agregó el Dr. Sáenz, quien aseguró que el cáncer de mama ocupa el quinto lugar de los tumores malignos padecidos por las mujeres en nuestro país.
El MINSA trabaja en aumentar las atenciones brindadas a la población en otros servicios médicos, por ejemplo en la última semana se realizaron más de 358 mil consultas ambulatorias.
“En las unidades de salud se realizaron un total de 358,185 consultas ambulatorias, se realizaron 359,010 exámenes de laboratorio, se tomaron a mujeres en riesgo y, también, según un grupo de edad un total de 17 mil 389 Papanicolau para la detección temprana del cáncer de cuello uterino y se realizaron 7,876 pruebas de VIH”, indicó la Dra. Martha Reyes, directora de Vigilancia para la Salud.
Para vencer esta enfermedad se trabaja en la detección a tiempo, concientizando a las mujeres en la importancia de las revisiones periódicas y el autoexamen, como medida preventiva para el cáncer de mama.
