Pidiendo justicia para el hombre que amparándose ser propietario de un medio de comunicación ha causado desgracias a familias nicaragüenses, promoviendo el odio y el enfrentamiento entre hermanos; así es como se refiere la señora Elva Rosa Solís de 68 años de edad sobre Miguel Mora.
Ella hasta la fecha lamenta la muerte de su hijo José Antonio Cruz Solís de 28 años, quien habitaba en Las Esquinas Carazo, y fue asesinado de un disparo en el ojo derecho, tragedia que ocurrió el pasado 28 de junio a las 7 de la mañana a pocas cuadras de donde éste habitaba.
La humilde ancianita con lágrimas en sus ojos y con ansias de que los autores directos e intelectuales de haber causado la muerte de su hijo paguen con todo el peso de ley, denunció como responsable a Miguel Mora Barberena, pues es quien instaba a la violencia, realizando constantes llamados a que asesinaran a militantes sandinistas desde su canal de televisión.
Siguiendo estas orientaciones, fue que delincuentes que se encontraban en tranques en Carazo dispararon a su hijo, quien trabajaba en un instituto cristiano evangélico y el día que sucedieron los hechos, después de haberse despedido de su hija de apenas de 2 años de edad, se dirigía a su centro de labores.
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Otras de las personas que también llegó al Ministerio Público a interponer formal denuncia, es doña Guillermina Centeno Castellón, quien culpa a Miguel Mora de ser autor intelectual de que ella junto a su familia quedaran en la calle, debido a los constantes llamados a la violencia desde su canal de televisión y fue así, según la víctima, que terroristas llegaron a su casa el pasado 22 de abril y robaron todas sus pertenencias.
Días después, exactamente el 28 de abril, nuevamente los sujetos llenos de odio siguiendo las instrucciones de Miguel Mora es que llegan y prendieron fuego a la casa, hasta dejarla reducida a cenizas, hecho que causó alegría al empresario de televisión, al darse cuenta de la familia sandinista que ahora tenía que dormir en la calle al haber sido destruido su hogar.
Doña Guillermina Centeno dijo que las pérdidas ascienden a más de los 120 mil dólares, dinero que ella no podrá conseguir para construir nuevamente su vivienda, teniendo que alquilar para que sus hijos no duerman en la calle, a como lo provocó Miguel Mora.
Cada una de las acusaciones están debidamente fundamentadas, con pruebas que demuestran la responsabilidad de Miguel Mora, quien podría estar tras las rejas en las próximas horas a fin que se haga justicia con las muchas víctimas que sufrieron las consecuencias de las campañas terroristas que éste promueve.
