Los cuatro jóvenes que fueron asesinados un 4 de noviembre de un 1967 hicieron historia al luchar por un revolución, el amor a su país ha prevalecido a 51 años del paso a la inmortalidad de Casimiro Sotelo, Hugo Medina, Roberto Amaya y Edmundo Pérez, todos jóvenes que lucharon contra la dictadura somocista.
"Para mí es un orgullo estar aquí, desde que mi cuñado Roberto Amaya ofrendo su vida por esta revolución, que la tenemos que defender cada día, yo en mi corazón me siento alegre porque en realidad vamos de victoria en victoria y sabemos que el Comandante Daniel, nuestro presidente y su esposa, están al frente de la revolución, no es lo mismo estar al frente a la batalla, recuerdo que ellos pasaron vivos por la casa, se los llevaron y los torturaron, les quitaron las uñas, los quemaron, dieron su vida, no claudicaron, no se rindieron", expresó, Daysi de Amaya, cuñada de Roberto Amaya, Héroe de Nicaragua.
"Eran jóvenes y defendían un ideal, que nos dejo a nosotros, y no debemos nosotros traicionar esa sangre que fue masacrada, entonces como revolucionario tenemos mucho que defender, antes no teníamos derecho a la educación sino era pagada y hoy en día tenemos muchos programas sociales", detalló, Juana Paola Aragón, ex combatiente.
Este domingo fue un derroché de talento y cultura en uno de los barrios emblemáticos Monseñor Lezcano, por sus actos de amor por la tierra pinolera que defendieron y no claudicaron, Nicaragua les rinde tributo, es por eso que en los semáforos de Rigoberto López Pérez, permanece un monumento en Homenaje a Casimiro Sotelo.
"Es una sana intención de buscar la paz y la reconciliación entre toda la familia nicaragüense, de que todos somos hermanos, todos tenemos que velar por el futuro de esta linda Nicaragua que hemos venido construyendo y que hoy estamos levantando de nuevo, les decimos escuchémonos, conversemos, abracemosno, disculpémonos, amemosno, porque solo así vamos a poder salir adelante", manifestó uno de los ex combatiente, quien fue uno de los participantes que develo el monumento.
La mejor prueba de que el legado de estos cuatros héroes esta en el pueblo, es la lucha permanente de los nicaragüenses que lograron derrotar el odio con amor.