Habían una vez familias de dos poblados llamados Rolando Rodríguez y El Porvenir instalados en las laderas del Volcán Casita. Trabajaban de forma cotidiana, muchos se dedicaban a la siembra de granos básicos y nunca se imaginaron que un 30 de octubre de 1998, la mayoría de ellos fallecerían.
Esta historia ocurrió en el municipio de Posoltega en el departamento de Chinandega, al occidente de Nicaragua a causa del paso del Huracán Mitch.
Dos décadas después, muchos recuerdan esa tragedia. "Yo perdí a unas familias entre hijos, nueras, nietos. Aún tengo fresca en mi memoria todo lo que ocurrió. Yo me salvé porque me fui a buscar una bestia (caballo o mula) y cuando regresé ya no encontré las casas, quedaron enterrados todos, no volví a ver a mi familia. Pareciera que fue ayer, han pasado 20 años y aún los tengo en mi corazón", dijo doña Olivia Cortez de 76 años quien en ese entonces tenía 56.
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Resulta que en gran parte del territorio de Nicaragua caía una gran lluvia que se extendió por varios días, pero nadie imaginaba que una desgracia ocurriría ese día.
Carlos Adán Camas Valdivia perdió a toda su familia y él se salvó porque estaba trabajando en Costa Rica. Aún recuerda a sus cuatro hijos menores de edad que perdió hace 20 años.
La tierra estaba saturada de tanta agua; en el campo solo se escuchaba el goteo del agua que caía sobre las hojas de los árboles, todos los animales se protegían de ese vendaval, igual las personas lo hacían desde sus casas de habitación.
Los lugareños del Volcán Casita recuerdan que todo ocurrió de noche y solo escucharon un estruendo. Se trataba de un deslave que traía mucho lodo, árboles, piedras y agua que arrastró a las viviendas. Casi nadie sobrevivió, se calculan más de 3,000 las personas que quedaron enterradas vivas en ese sitio.
En ese entonces gobernaba Arnoldo Alemán (1996-2001), y la alcaldesa de esa época Felicita Zeledón llamó al mandatario para informarle de la tragedia y que habían miles de muertos, con lo cual la respuesta de Alemán fue: "Vos estás loca" y luego le cortó la llamada telefónica.
Cristobal Gradys, Secretario del Concejo Municipal de la Alcaldía de Posoltega, junto a otros personas depositaron este martes ofrendas florales en el Parque Memorial dedicado a las víctimas.
Domingo Miranda, de la iglesia de Dios de la Profesía en Posoltega, ofició un culto a familiares de las víctimas, a quienes les reiteró que en Cristo las más de tres mil víctimas están vivas.
El Huracán Mitch fue considerado el más mortífero del hemisferio occidental desde 1877. Este fenómeno se formó el 22 de octubre en el Océano Atlántico, ocho días después ya había afectado a miles de familias de Centroamerica, impactando directamente a Nicaragua y Honduras.
