Con el asesinato del comandante Camilo Ortega, en la masacre de Los Sabogales hace 45 años; nació su legado histórico y la militancia Sandinista rinde en toda Nicaragua honores al Apóstol de la Unidad. En Managua las autoridades municipales participaron en una ceremonia solemne; dedicada a él en el cementerio general de la ciudad.
El joven que desde su infancia conoció los principios socialistas y se comprometió con las causas de las mayorías marginadas, por la dictadura de los Somoza, se mantiene presente e inspirando a las generaciones que le preceden, aseguró la alcaldesa.
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«Lo recordamos con mucho cariño, con mucha admiración, con mucho respeto; pero sobre todo con el compromiso de la militancia sandinista, de la generación actual, es la continuidad de esta Revolución, es el fortalecimiento de nuestra paz, de nuestra unidad como Frente Sandinista, como pueblo de Nicaragua», mencionó Reyna Rueda.
Tras la liberación de Nicaragua del sometimiento que la dictadura somocista permitía, por beneficios propios, a sus aliados externos, hoy los nicaragüenses mantienen firme el compromiso de defender las luchas ganadas.
Un referente a la vocación y servicio al pueblo
«Para que continuemos respirando esta paz, esta armonía, pero sobre todo estas transformaciones de bienestar y seguridad para nuestro pueblo. Hoy lo recordamos con esa lucha inclaudicable, esa entrega», afirmó la alcaldesa de Managua.
Para los miembros de la Policía Nacional, el comandante Camilo Ortega es referente de vocación y servicio al pueblo.
«Cayó en combate para estar eternamente en nuestra actuación, está siempre presente en nuestro compromiso, siempre presente en esa labor diaria, en cada momento que estamos sirviéndole a nuestro pueblo», destacó el comisionado general Fernando Borges, segundo jefe de la Policía Nacional, en Managua.
Los homenajes también están dedicados al legado de Hilario Sánchez, Arnoldo Kuant y Moisés Rivera; otras víctimas del mortal ataque de la guardia somocista en Los Sabogales.
