La historia de Nicaragua fue marcada por una tragedia considerada terrible. Hace 51 años, la guardia del dictador Anastasio Somoza perpetró la masacre de más de 300 nicaragüenses que fueron honrados este lunes por su ejemplo de amor patriótico.
"Como la lucha de un pueblo así es, por eso hay que recordar siempre a esos héroes, a esa gente que entregó su vida porque hoy estemos en esta Nicaragua, de paz, de reconciliación, de avances económicos y sociales de las familias nicaragüenses. Los partidos liberales quisieron olvidar todo, acordémonos que el liberalismo de Somoza quiso venderle al pueblo de Nicaragua que Sandino era un bandolero y lo asesinó, quiso vender que Rigoberto López fue un suicida, y no una lucha de un pueblo contra una dictadura. De tal manera que el Frente Sandinista vino a reivindicar todas esas luchas desde la colonia hasta nuestra fecha, y que se refleja en nuestra Constitución Política", expresó el diputado Edwin Castro, Jefe de Bancada del FSLN.
Con una ofrenda floral, los diputados y trabajadores del Poder Legislativo rindieron homenaje a las víctimas de esa matanza de un 22 de enero de 1967.
"Los sandinistas que andábamos aquí, como Julián y David, resultó al final que son los que enfrentaron con armas a la guardia que avanzaba sobre la gente. Y resultó que la gente después se convenció de que era el Frente Sandinista la única opción de lucha contra el somocismo", extenuó el diputado sandinista Jacinto Suárez.
Tras ese día de luto el pueblo de Nicaragua tomó más conciencia y luchó por la liberación hasta vivir en este tiempo de paz y prosperidad. "Los trabajadores nos solidarizamos este día al conmemorar aquel 22 de enero, de aquel tiempo que aquellos compañeros iniciaron una lucha para la liberación de Nicaragua", dijo un trabajador de la Asamblea.
En aquella masacre miles de opositores se manifestaron contra la dictadura somocista en una plaza de Managua.
