El cultivo de palma africana en los últimos años ha tomado auge y es una gran atractivo para inversionistas nacionales e internacionales que llegan a Nicaragua para invertir en terrenos que fueron maltratados por el ganado.
La palma africana tiene una vida útil de 30 a 50 años, una vez sembrada dura tres años para dar su fruto, de ella es aprovechada todo; del fruto se produce el aceite, de las cáscaras el abono y de la broza se alimentan las calderas para la generación de energía eléctrica.
Un ejemplo de nueva inversión es Extraceite S.A, una empresa con capital guatemalteco que produce y procesa el fruto de la palma africana, para extraer el aceite vegetal, el cual es enviado a los mercados de México y nuestro país.
La empresa Extraceite S.A se inauguró en octubre del 2016, del grupo Palma San José, con una inversión de 13 millones de dólares. La planta posee tecnología de punta amigable con el medio ambiente, con tratamiento de aguas residuales, además genera energía limpia de manera sostenible y el procesamiento de compostaje que es utilizado para abonar las tierras.
Otro ejemplo de inversión es la empresa Kukra Development Corp. en Kukra Hill, dedicada también al procesamiento de palma africana por más de 20 años y que emplea a más de 500 personas en la zona, quienes además ahora cuentan con los beneficios que provee formalidad al empleo.
Son muchos los empresarios que cada vez se aventuran al cultivo de palma africana, tal es el caso de la empresa Wapi y Oleocaribe que ya están cultivando sus primeras plantas en viveros.
“38 millones de dólares es la inversión de la primera etapa de nuestro proyecto, para en 2020 esperamos haber invertido unos 70 millones de dólares en su última etapa, lo que implicaría la instalación de la planta y la generación de más empleo”, expresó Ernesto Vargas, gerente de Wapi Industrial.
“Nosotros nos encontramos en una etapa inicial con el 5% del área que pensamos establecer, contamos con 8 mil manzanas de tierra y esperamos para los próximos años llegar a las 4 mil sembradas”, dijo Juan Carlos López, jefe agrícola de Oleocaribe.
Es el clima de inversiones y la estabilidad económica de Nicaragua la clave para invertir en nuestro país, explican los empresarios.
“Precisamente por la estabilidad macroeconómica que ofrece el país, la relación de diálogo y consenso que existe entre el Gobierno y la empresa privada y el apoyo a los trámites que se requieren para una inversión de esta envergadura”, compartió Samuel García, Gerente Industrial de Extraceite S.A.
“La economía está estable, está bien, confiamos en que el país seguirá creciendo, además se presta toda las condiciones para que lleguen más inversionistas”, compartió Ernesto Vargas, gerente de Wapi Industrial.
La instalación de estas empresas en la Región Autónoma de la Costa Caribe Sur de Nicaragua significan un paso hacia el desarrollo de las zonas, pues poco a poco se mejora la calidad de vida de sus habitantes, quienes pueden laborar en estas empresas que han significado unos 120 millones de dólares en inversiones para el país.