De acuerdo a las estadísticas presentadas por el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, INETER, sobre el comportamiento de los sismos en los últimos años, el incremento de las actividades sísmicas no representan un parámetro para determinar eventos mayores de la naturaleza como son los terremotos.
Según los registros en el año 2014, en diciembre se registraron 149 sismos, en noviembre 185, octubre 199 y septiembre 587 eventos, sin representar ningún peligro para la población.
Wilfried Strauch, asesor de INETER, señala que: "la sismicidad es un factor que tiene una variabilidad muy grande, especialmente el número de sismos no es un buen parámetro para predecir o para decir algo sobre el estado de la sismicidad tectónica en un país, es muy diferente’’.
Entre los factores de alta sismicidad, Strauch destaca enjambres de réplicas desencadenadas por los terremotos, tomando como ejemplo septiembre del 2014 donde se registran casi 600 sismos tras el evento de 6,9 grados de magnitud entre el volcán El Hoyo y el volcán Momotombo.
"Otro factor puede ser no un sismo grande sino un enjambre sísmico, si buscamos en la estadística vamos a ver cuándo se dio el enjambre en El Sauce, incrementando una gran cantidad de sismos’’, destacó.
En enero del 2014 se registraron 85 sismos, casi similar en lo que va de febrero donde se reportan a la fecha 54 eventos que podrían incrementarse al finalizar el mes, estos eventos se ubican principalmente en el Océano Pacífico, señala Strauch.
Con el desarrollo de la red sísmica, INETER continúa vigilante ante cualquier eventualidad para llevar a la inmediatez la información a la población que está organizada y sabe cómo actuar ante una emergencia, gracias a los ejercicios de simulacros que el Gobierno desarrolla con el objetivo de preservar la vida y tranquilidad de las familias.