Son lugares acogedores, promocionan la vida, el trato es humano y sobre todo el seguimiento clínico que les garantizan a las embarazadas de Nicaragua tener un parto sin complicaciones.
Las Casas Maternas se han convertido en un hogar, desde estos espacios las mujeres también aprenden un oficio como saber de costuras, manualidades y una alimentación sana.
Micaela es una de las 15 embarazadas que asiste todos los días, vive en una comunidad de nombre Río Medina a más de 15 kilómetros de la zona urbana de Nandaime en Granada.
Un equipo de promotores identificó su situación prenatal, la visitaron y le explicaron las ventajas de asistir a la Casa Materna. Debido a lo lejos, un vehículo del Ministerio de Salud va por ella.
En sus 38 semanas de embarazo Micaela dice que recibirá a su bebé con amor y mucha dedicación.
La doctora Martha Campos, directora del hospital primario de Nandaime, manifiesta que todos los días un equipo de doctores va a la Casa Materna para darles un seguimiento o diagnóstico oportuno a las mujeres.
Por su parte Eddy Villarreyna, promotor del Ministerio de Economía Familiar, invita a las embarazadas a participar en la siembra de frutas y vegetales en los patios, estos mismos alimentos saludables los consumen para aportar los nutrientes necesarios durante este período.
Ana Romero, vicealcaldesa de Nandaime, indicó que la municipalidad destina los fondos necesarios para que la Casa Materna funcione, siempre esté limpia y con las condiciones necesarias.
Cuando una embarazada va a dar a luz, una ambulancia va por ella y la traslada al centro asistencial del municipio o del departamento.
La vida de las mujeres cambia porque pasan a tener un cuidado especial, son varias personas que velan por la salud de la futura madre y del bebé.
Nandaime se ubica a unos 70 kilómetros de Managua, cuenta con 84 comunidades y 4 barrios.