Una tragedia tuvo lugar en una clínica de Rusia, luego que médicos del recinto les recomendaran «tomar líquido de batería» a sus pacientes, provocando que siete de ellos fallecieran y decenas resultaran intoxicados.
De acuerdo al medio New York Post, el hecho ocurrió al interior del Centro de Diagnóstico Municipal de San Petersburgo, en donde las víctimas sufrieron muertes agonizantes y lesiones crónicas producto del mortal error.
Los informes indican que los pacientes bebieron «líquido de la batería» para someterse a radiografías del esófago, el estómago y el intestino en la clínica.
Pero pronto comenzaron a experimentar dolores que supuestamente los médicos ignoraron. Es así cómo, al menos, cuatro de los pacientes fallecieron menos de 12 horas después de beber el líquido.
Tragedia en Rusia
La esposa de uno de los fallecidos en Rusia, Alexandra, dijo que su marido le había dicho a los médicos mientras bebía el líquido de que «se sentía mareado y se le oscurecieron los ojos».
«Se lo contó a los médicos en Rusia; pero le respondieron que era normal, que esto podía pasar. Lo terminó todo y se llevó a cabo el procedimiento», añadió.
«Dijo que no se sentía bien y le dijeron: ‘Vete a tu casa y acuéstate’. Llegó a casa en un estado terrible, no podía estar de pie normalmente»; expresó la mujer.
Según el citado medio, un médico ruso de alto rango, identificado como Yevgeny Popov, ha sido detenido acusado de negligencia por usar fluidos industriales que no sirven para consumo humano.
Investigan la clínica por negligencia
«En esta clínica en Rusia, simplemente tomaron un polvo no certificado y lo disolvieron en agua»; fueron las duras palabras de patóloga Zhanna Shmidt al periódico local Moskovsky Komsomolets.
«Lo que recibieron en realidad fue líquido de batería. Esto no es una metáfora, es cómo era. Las baterías de automóviles también contienen sales de bario»; explicó.
«Según tengo entendido, este polvo técnico se vendió para algún tipo de investigación de laboratorio, y no para uso oral»; agregó.
Además, indicó que las personas que bebieron líquido de batería «naturalmente les causó daños en el intestino, quemaduras graves y envenenamiento».