Sangriento mes de enero en Nigeria luego que quemaran vivo a un sacerdote católico Isaac Achi, párroco de los Santos Pedro y Pablo, dentro de la casa parroquial.
Los hechos ocurrieron la madrugada del pasado domingo en el estado de Níger. Los clérigos Isaac Achi y Collins Omeh se encontraban en el interior de la rectoría cuando los atacantes la quemaron. Omeh logró escapar; pero en su huida resultó herido al recibir un impacto de bala.
Por lo tanto, el gobernador de Nigera, Abubakar Sani Bello, condenó el crimen. Y aseguró que «atacar una instalación religiosa para asesinar a alguien es la peor dimensión de los ataques terroristas».
Sangrienta ola de violencia en Nigeria
«Que un sacerdote sea asesinado de esa manera significa que no todos estamos a salvo, estos terroristas se han vuelto locos y es necesaria una acción drástica para poner fin a esta carnicería en curso»; manifestó.
Por su parte, la Asociación Cristiana de Nigeria denunció que el ataque «terrorista» tiene como objetivo acabar con toda la comunidad cristiana del país.
«El continuo asesinato y secuestro de clérigos cristianos en Nigeria es alarmante. Esto tiene que detenerse a toda costa. La comunidad cristiana debe levantarse y unirse para poner fin a esto», urgió.
PHOTOS: Fulani herdsmen Burn Igbo Catholic Priest Alive In Niger State, Northern Nigeria
Fulani herdsmen have burnt a Catholic priest, Reverend Father, Isaac Achi of Saint Peter and Paul Catholic Church, to death in the Kafin Koro Community in Paikoro Local Government Area of pic.twitter.com/vTTBYFoyBa
— Mijovia News (@MijoviaNews) January 15, 2023
Igualmente, agregó que «Nigeria se está convirtiendo en un campo de exterminio donde las personas son sacrificadas como pollos». Y de la misma manera instó a las agencias de seguridad y a las autoridades a tomar cartas en el asunto «antes de que se salga de control».
Cabe destacar que, los ataques contra objetivos religiosos en Nigeria son frecuentes y en esa misma jornada; en el estado de Katsina, otro grupo de individuos armados atacó una iglesia durante el servicio de la mañana, hiriendo a su pastor y secuestrando a 25 feligreses.