Un poderoso tifón que llegó el miércoles al norte de Filipinas causó la muerte de dos personas, provocó inundaciones y derribó árboles a su paso; obligando a miles de habitantes a ser evacuados a centros de emergencia.
El tifón Doksuri registró vientos de una velocidad máxima de 175 kilómetros por hora en su paso cerca de la pequeña isla Dalupiri, al norte de Luzon -la principal del archipiélago; indicó la agencia meteorológica nacional filipina.
También, la agencia advirtió de «condiciones violentas y que constituyen una amenaza para la vida» a raíz de las fuertes lluvias y vientos que azotan esta región del norte del país.
Unas 12.00 personas fueron evacuadas en la provincia de Cagayan, que incluye la isla Dalupiri, tras alertas de crecidas de las aguas de hasta tres metros; señaló a AFP un responsable provincial de gestión de desastres, Ruelie Rapsing.
Dos muertos en Filipinas por el tifón Doksuri
En la vecina provincia de Isabela, una mujer que vendía pan murió el miércoles al ser golpeada por un cocotero que cayó en la municipalidad de Ramon; indicó una responsable provincial de la oficina de gestión de desastres, Constante Foronda.
Unas 1.500 personas fueron evacuadas en las comunidades costeras de Isabela; agregó Foronda.
La segunda víctima mortal del tifón fue un chico de 16 años, que falleció cuando un deslizamiento de tierra aplastó su vivienda en la ciudad de Baguio; señaló a la AFP un responsable local, Julius Santos.
Doksuri había sido calificado de supertifón mientras se encontraba en el océano Pacífico, pero se debilitó al acercarse a Filipinas.
Su intensidad debería reducirse aún más a medida que avance por el mar de China Meridional, pasando al sur de Taiwán en dirección de China.