El Parlamento de Israel aprobó este domingo por 60 frente a 59 votos la investidura de Naftali Benet del movimiento nacionalista Yamina, como nuevo primer ministro.
Una votación que pone fin a más de una década de mandato de Benjamín Netanyahu.
La sesión estuvo interrumpida constantemente por gritos de la que, ahora, será la oposición, el partido Likud liderado por Netanyahu.
El presidente del parlamento se repitió en múltiples ocasiones llamando al orden y también expulsando a parlamentarios.
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Aprobado con una estrecha mayoría, el nuevo Ejecutivo de unidad nacional envía a la oposición a Netanyahu y estará liderado los dos primeros años por el ultranacionalista Naftali Benet y los dos siguientes el centrista Yair Lapid.
Ya hay nuevo primer ministro en el Estado de Israel y se llama Naftali Bennett. Electo con 60 votos a favor, 59 en contra y 1 abstención. Netaniahu después de 12 años pasa a la oposición frente a otro gobierno de derecha. Nace un Gobierno muy frágil. pic.twitter.com/Qc29FPk1p1
— Pedro Brieger (@PedroBriegerOk) June 13, 2021
Acabando con más de dos años de bloqueo político en Israel.
Entraron en votación en el Parlamento
Benet lidera la formación Yamina, que aboga tanto por el ultraliberalismo económico, como por la línea dura ante Irán.
Por la anexión de casi dos tercios de la Cisjordania ocupada, lo que brinda a su partido de derecha radical mucha popularidad entre los colonos judíos.
Antes de la votación, intervino en la apertura de la sesión de la Kneset (Parlamento), mientras parlamentarios del Likud de Netanyahu, de partidos ultraortodoxos y del Partido Sionista Religioso lo increpaban e insultaban, obligando a interrumpir su discurso en más de una ocasión.
Nueva era
El nuevo Gobierno de unidad nace del consenso de ocho partidos políticos diferentes
Desde ultranacionalistas religiosos hasta izquierdistas pacifistas, pasando por centristas laicos e incluso por primera vez un partido árabe.
Previo a la votación, cantando «Bibi ciao» con la melodía de la canción revolucionaria italiana «Bella Ciao».
Unos 2.000 israelíes se manifestaron el sábado por la noche en Jerusalén para celebrar la «victoria», en vísperas del esperado fin del mandato de Netanyahu.