Este viernes, Gotabaya Rajapaksa confirmó su renuncia a la presidencia de Sri Lanka, luego que miles de manifestantes invadieran la casa presidencial.
Así mismo, la renuncia del ex mandatario la confirmó el portavoz designado de dicho país asiático, Mahinda Yapa Abeywardena; quien fue el receptor de la carta de abdicación por parte de Gotabaya Rajapaksa.
Por su parte, el portavoz designado, afirmó que el nuevo presidente será elegido en los próximos siete días desde la renuncia de Rajapaksa.
«Mi objetivo es completar el proceso lo antes y con el mayor éxito posible»; mencionó el portavoz Abeywardene, y agregó que es fundamental garantizar que se elija un nuevo presidente en un marco transparente y democrático. Mientras tanto Ranil Wickremesinghe continuará como presidente en funciones.
Sri Lanka envuelto en una ola de manifestaciones
La ausencia de un anuncio formal de la renuncia de Gotabaya Rajapaksa había generado cautela entre los manifestantes antigubernamentales que celebraron la salida del presidente.
Por otra parte, el anterior presidente huyó el martes del país con rumbo a las Maldivas; y al cabo de unos días partió hacia Singapur, desde donde, al parecer seguro, hizo conocer su renuncia formal a la presidencia de dicho país.
Tras la huida de Rajapaksa, el ahora presidente interino Ranil Wickremesinghe, decretó el estado de emergencia en el país y el estado de excepción en la provincia donde se encuentra la capital comercial, Colombo.
Sri Lanka's President Gotabaya Rajapaksa Formally Resigns After Fleeing The Country As He Emails Resignation Letter to Parliamentary Speaker. The Sri Lankan Inflation Rate Jumps to All Time High 54% in June 2022.#SriLanka pic.twitter.com/hM7PpIa0ci
— Siasi King (@KingSiasi) July 15, 2022
Por su lado, Rajapaksa tomó la presidencia justo el día en el cual se esperaba se hiciera efectiva la dimisión de Rajapaksa, en medio del clima de protestas multitudinarias que vive ese país asiático.
También, esta acción provocó la movilización de manifestantes en las instalaciones de la oficina del primer ministro para exigir su renuncia; manifestación la cual la Policía intentó controlar con el uso de gases lacrimógenos.