Un ataque aéreo atribuido a las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) contra el Hospital Saudí en El Fasher, Darfur Norte, Sudán, dejó al menos 70 muertos, incluidas mujeres y niños, según denunció este sábado el gobernador de Darfur, Minni Arko Minawi.
El hospital era uno de los últimos en funcionamiento en la región, devastada por el conflicto armado entre el Ejército sudanés y las RSF.
El ataque en Sudán, perpetrado con drones, ocurrió el viernes y provocó decenas de heridos, además de graves daños en el centro de salud. Minawi calificó la acción como “vergonzosa” y equiparó el comportamiento de los responsables al del Estado Islámico. Imágenes del hospital destruido han circulado ampliamente, generando condena internacional.
Este no es el primer hospital en ser blanco de ataques en El Fasher. Según Médicos Sin Fronteras, los hospitales pediátricos Babiker Nahar y del Sur fueron cerrados en mayo y junio de 2024, respectivamente, debido a bombardeos y saqueos. La organización ha señalado que ninguna de las partes en conflicto respeta las instalaciones médicas.
Paramilitares en Sudán siembran terror
Desde abril de 2023, el conflicto ha desplazado a más de 8.3 millones de personas, según la ONU, y ha causado el colapso del sistema sanitario y una crisis alimentaria extrema que afecta a 24 millones. Además, la Organización Mundial de la Salud reporta que el 70-80 % de los hospitales están cerrados o funcionan de forma limitada tras más de 120 ataques contra instalaciones de salud.
Mientras tanto, el Ejército sudanés continúa su ofensiva, tomando recientemente una refinería de petróleo y cercando el cuartel general de las RSF en Jartum, la capital. La violencia y el caos en Sudán siguen dejando una estela de muerte, destrucción y sufrimiento.