Pony es una orangután que, durante muchos años, ha sido la estrella de un burdel de Borneo, en Indonesia. Allí saciaba el apetito sexual de los trabajadores de una granja cercana.
Desde hace 18 años vive en un refugio para orangutanes, tratando de volver a confiar nuevamente en las personas y sin poder vivir en la naturaleza a causa de los traumas y secuelas que le quedaron de sus años de maltratos.
Antes de su rescate, Pony era una de las principales atracciones de un burdel . Ella era la “solución” para saciar su apetito sexual por poco dinero, y sorprendentemente era toda una sensación.
Era un suplicio diario, Pony permanecía encadenada en el burdel, y cada dos días le afeitaban todo su cuerpo para dejarla “lista” para los clientes. Esto le causaba llagas en la piel, irritaciones. Además la exponía a los mosquitos y a enfermedades.
Estrella de un burdel
También la maquillaban, obligando a usar labial; además de mascarillas, vestidos, pelucas; también cadenas y todo tipo de artefactos para hacerla “más atractiva”, pero que solo servían para hacer su situación más degradante.
A Pony la enseñaron a hacer actos sexuales desde muy pequeña, cuando fue arrebatada de los brazos de su madre y vendida quien sabe cuantas veces antes de dar a parar a aquel prostíbulo.
Cuando la rescataron, dicen los expertos, la orangután ya llevaba mucho tiempo siendo abusada. Un primate de esta especie se queda con su madre entre los seis u once primeros años de vida. Por lo que la separación de Pony debió ser muy traumática.
“Pony está viviendo una vida saludable dentro del complejo en estos días. A la edad de 24 años, su condición actual, la falta de habilidades y comportamiento naturales, no le permite ser colocada en otro tipo de recintos”; dice en una comunicación reciente con The Sun el portavoz de la fundación Nico Hermanu.
La fundación cuenta con una isla santuario donde tiene orangutanes rescatados, pero Pony todavía no está apta para vivir allí a causa de sus traumas.
“Esperamos que algún día pueda tener la oportunidad de vivir en la isla santuario. En el complejo en el que se aloja, Pony siempre muestra un apetito saludable por las frutas y las herramientas de enriquecimiento que le brinda nuestro equipo”, agrega.
Tráfico de orangutanes
De acuerdos con expertos consultados por este medio, el tráfico de orangutanes es un fenómeno que viene en aumento y que con la deforestación se ha convertido en una de las principales amenazas de la especie.
Dicen que en la actualidad, redes como Instagram y Facebook se usan para comercializar orangutanes en el mercado negro; los cuales pueden llegar a costar unos 14.000 dólares.
Nadie sabe exactamente cuánto tiempo Pony fue abusada antes de ser rescatada del burdel en Indonesia.
“Fue horrible. Ella era una esclava sexual, era grotesco. Estaba cubierta de abscesos, y le pusieron maquillaje y aretes. Debe haber estado sufriendo mucho. Es horrible pensar en lo aterrorizada que a de haber estado”; dijo Michelle Desilets, que trabajó como directora de la Borneo Orangutan Survival Foundation UK cuando Pony fue rescatada.