Rose Stokes, una bebé de dos años fue castigada por sus padres de una manera cruel, la metieron en agua hirviendo luego de que ensuciará el pañal y no les avisara, esto le provocó fuertes quemaduras que no fueron atendidas lo que ocasionó su muerte.
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Los hechos sucedieron el 20 de mayo del 2017, en Queensland, Australia. Shane David de 33 años de edad, padre de la niña, y Nicole Betty de 26 años, metieron a su hija en agua hirviendo luego de que la niña ensuciara su pañal, esto lo hicieron como una forma de castigo, el agua quemó su espalda, entrepierna y talones.
Los padres de la niña al ver la gravedad de las quemaduras decidieron no llevarla al médico, por lo que buscaron remedios en internet, sin embargo de nada sirvió y murió a los cinco días de un paro cardíaco provocado por las infecciones de la herida.
Tras el hecho ambos fueron detenidos, y tras cuatros años en busca de justicia se declararon culpable este lunes. El padre de la niña confesó que él fue quien sostuvo a la niña en el agua caliente , por lo que fue sentenciado a 11 años de prisión, mientras la madre solo 9 años y seis meses.
Cuando los oficiales entraron a la casa de la familia en busca de pruebas en el 2017 , hallaron vendas, papel higiénico y colchones empapados de sangre por toda la casa.
Fuertes quemaduras
En la autopsia realizada a la menor se pudo encontrar que había consumido antidepresivos , los cuales eran recetados al padre, se los habían administrados a la menor para que se calmara. Cuando la niña nació el departamento de seguridad infantil la trató por tener desnutrición severa.
Cabe señalar que si la niña hubiese sido llevada a tiempo al hospital se hubiera recuperado en un 100% de las heridas
