Rusia pide solución pacífica a crisis creada en Kirguistán

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El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia emitió este martes un comunicado en el cual pide una solución negociada y pacífica a la crisis creada en Kirguistán luego de los comicios parlamentarios, cuyos resultados han sido rechazados por la oposición.

El texto de la Cancillería rusa hace "un llamado a todas las fuerzas políticas en este momento crítico para que la república muestre sabiduría y responsabilidad con el fin de preservar la estabilidad y la seguridad internas", en referencia a los hechos violentos ocurridos en la exrepública soviética.

Rusia expresó su preocupación por la estabilidad política en Kirguistán, un país asiático que mantiene estrechas relaciones con el Kremlin y continúa siendo un socio estratégico y aliado de Moscú.

 

Este domingo se celebraron elecciones parlamentarias en Kirguistán con la participación de 16 partidos políticos. Los resultados preliminares mostraron que cuatro partidos superaron el umbral del siete por ciento para ingresar al Parlamento.

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Sin embargo, algunos partidos que no alcanzaron el umbral de votación mínima organizaron protestas a escala nacional el lunes para exigir la anulación de las elecciones, alegando graves violaciones.

 

Mientras, la Comisión Electoral Central anuló este martes los resultados de las elecciones y el Parlamento kirguís eligió a dos opositores como primer ministro y jefe del Legislativo. Todo ello, después de los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes que dejaron al menos 590 heridos y un fallecido.

El antiguo diputado Sadir Zhapárov fue elegido nuevo jefe del Gobierno durante la sesión extraordinaria del Parlamento, después de ser liberado este lunes de la cárcel por los manifestantes. Zhapárov cumplía una pena de cárcel por instigar disturbios en 2013 y fue absuelto con urgencia por el Tribunal Supremo.

Refuerzan medidas de seguridad 

Otro opositor, Miktibek Abdildáev, asumió la jefatura del Parlamento, mientras miles de personas siguen concentradas en el centro de la capital, Biskek. Por su parte, la Policía kirguís ha reforzado las medidas de seguridad en algunos puntos estratégicos de la ciudad, mientras se han formado milicias en algunos barrios para evitar saqueos.

 

Este martes, el presidente de Kirguistán, Sooronbái Zheenbékov, denunció que “fuerzas políticas intentaron anoche tomar el poder de forma ilegal y violaron el orden público aprovechando como pretexto los resultados electorales", informó Telesur.