India superó el viernes el umbral de 1 millón de casos declarados de la COVID-19, mientras que las autoridades locales aumentan las restricciones sanitarias y ordenan medidas de confinamiento para contener la propagación de la epidemia de coronavirus.
Tercer país del mundo en número de contagios registrados, por detrás de Estados Unidos y Brasil, el gigante asiático había registrado hasta este viernes 25.602 muertos y 1.003.832 casos confirmados desde que empezó la pandemia, según cifras oficiales publicadas por el Ministerio de Salud.
El segundo país más poblado del planeta registró cerca de 35.000 casos y 700 muertes atribuidas al virus en las últimas 24 horas, según el balance oficial.
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El número de decesos por COVID-19 en India sigue siendo relativamente bajo en comparación con los países más afectados, con 18 muertos por millón de habitantes, comparado con los 417 de Estados Unidos, el país más devastado por la pandemia, según cálculos de la AFP a partir de datos oficiales.
A iniciativa de los gobiernos regionales, en las últimas semanas se ordenaron medidas de reconfinamiento y restricciones sanitarias por todo el país, de 1.300 millones de habitantes.
Los 125 millones de habitantes del Estado de Bihar (norte) fueron reconfinados el jueves a medianoche, un día después de que se aplicara una medida similar para los 13 millones de habitantes de la aglomeración de Bangalore (sur).
A finales de marzo, el gobierno indio impuso un firme confinamiento que se prolongó hasta principios de junio, cuando fue levantado para reactivar la economía, pese a que el número de casos se estuviera disparando. Aún así, muchas de las restricciones siguen en vigor.