Una mujer iraquí fue fotografiada retorciéndose del dolor en su cama de hospital después de que su esposo rociara gasolina sobre su cuerpo y le prendiera fuego durante el encierro obligado por el coronavirus Covid-19.
Malak Haider al-Zubaidi, de 20 años, fue fotografiada en el hospital de la ciudad de Najaf la semana pasada antes de morir por una falla orgánica múltiple causada por sus quemaduras.
Las horribles imágenes han causado indignación en las redes sociales desde que aparecieron en línea.
El esposo Mohammed Al Mayahli, un oficial de policía, fue puesto bajo custodia.
Te puede interesar: "Acá estoy con mi tóxica": Novia lo apuñala pero regresa con ella después
La familia de Malak dice que él fue abusivo con ella y que cortó todo contacto durante los últimos ocho meses, causando que se angustiara.
Dicen que el día que fue quemada, Mohammed la atacó con un cable de carga del teléfono antes de que la rociara con gasolina y la prendiera fuego.
Él negó el ataque, subió una publicación a las redes sociales alegando que estaba sufriendo una enfermedad mental y se prendió fuego.
Tras el ultraje, se inició una investigación.
El código penal de Iraq le da a los esposos el derecho de "disciplinar" a sus esposas y no hay leyes que penalicen la violencia doméstica.
Sin embargo, la constitución del país prohíbe "todas las formas de violencia y abuso en la familia".
Stephen Hickey, embajador de Gran Bretaña en Irak, escribió en las redes sociales: "Sentimos mucha tristeza por el caso de Malak al-Zubaidi, y esperamos que la investigación se complete rápidamente".
"Nos gustaría recordarle que la violencia doméstica, ya sea abuso fisiológico o físico, es un problema predominante en todo el mundo".