Varios muertos en un ataque del EI contra un templo hindú sij en Kabul

Kabul, Afganistán | AFP | Al menos 25 civiles murieron en un ataque este miércoles contra un templo hindú sij en el centro de Kabul, en un nuevo golpe contra las minorías religiosas reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI) en Afganistán.

"Desgraciadamente 25 civiles murieron y ocho resultaron heridos en el ataque de hoy", dijo el vocero del ministerio del Interior Tariq Arian, quien agregó que un agresor fue abatido y 80 personas rescatadas.

Otra fuente de seguridad de alto rango informó de 24 muertos, 13 heridos y tres miembros del EI neutralizados.

"La mayoría de personas que estaban atrapadas en el interior fueron rescatadas", había precisado antes Tariq Arian.

 

 

Una representante de la comunidad hindú sij en el Parlamento había declarado que "unas 150 personas" se encontraban en el templo, donde viven varias familias y en el que suele haber gente rezando por las mañanas.

El grupo EI reivindicó el ataque, según informó el organismo estadounidense de vigilancia de movimientos extremistas SITE.

Las oraciones habían empezado cuando "un hombre vestido con un uniforme de policía y con una Kalashnikov entró en la sala. Primero disparó contra el guardia, luego contra un niño que estaba cerca de él", explicó a la AFP Raju Singh Sonny, un fiel.

"Otros atacantes entraron en el edificio y fueron de sala en sala disparando contra la gente", prosiguió este hombre, que consiguió huir pero que tenía muchos allegados atrapados en el interior.

Según fotos que la AFP pudo ver, había niños llorando evacuados por hombres armados. También se podían ver cuerpos en el suelo, heridos y un charco de sangre.

 

Los talibanes negaron rápidamente ser los autores del asalto. "El ataque no tiene nada que ver con nosotros", declaró el portavoz Zabihulá Mujahid en Twitter.

 

Minorías religiosas, en el punto de mira

El último ataque importante cometido por los talibanes se remonta a la semana pasada, cuando mataron a por lo menos 24 policías y soldados en el sur de Afganistán.

Por su parte, los yihadistas del EI han multiplicado los ataques en la capital afgana, a menudo contra las minorías religiosas.

A principios de marzo el grupo reivindicó un ataque contra una reunión política de la minoría hazara, cuyos miembros suelen ser chiitas. Murieron 30 personas.

En julio de 2018, el EI reivindicó un ataque suicida en Jalalabad (este) contra sijs e hindués afganos en el que murieron 19 personas.

Unos 1.000 sijs e hindúes viven en Afganistán, un país de mayoría musulmana. 

Este ataque del miércoles cae en un momento crítico para Afganistán, inmerso en una crisis política interna, una ofensiva talibán y el nuevo coronavirus.