DAKAR, Senegal (AP) — Seis países africanos más anunciaron infecciones del nuevo coronavirus en las últimas 24 horas al tiempo que la propagación de la enfermedad aumenta en el continente.
Ahora son ya 16 de los 54 países africanos los que registran casos del COVID-19, si bien las autoridades aseguraron que en su mayoría son importados.
Los expertos advierten que en el continente de más de 1.300 millones de habitantes, la contención es crucial dado que los sistemas de salud africanos, de antemano al límite, podrían registrar a una elevada tasa de mortandad y una dura crisis que impactaría a nivel mundial.
Los países africanos apenas empezaron a reportar casos en febrero, y la mayoría de ellos han sido importados por viajeros de Europa y Estados Unidos. El viernes, Kenia, Guinea, Sudán y Etiopía reportaron sus primeros casos, mientras que Gabón y Ghana hicieron lo mismo el jueves por la noche.
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Sudáfrica anunció ocho nuevos casos el viernes, lo que elevó su total a 24. En medio de una creciente preocupación por todo el país, las fuerzas militares se preparan para repatriar a 121 estudiantes sudafricanos que se encuentran en el epicentro del brote, Wuhan, China. Los estudiantes y los elementos del ejército en el vuelo serán puestos de inmediato en cuarentena.
África hasta ahora ha logrado contener el virus exitosamente debido a que ha detectado los casos en sus primeras etapas, de acuerdo con la doctora Mary Stephen, oficial técnica de la oficina de la Organización Mundial de la Salud en Brazzaville, República del Congo.
Las cifras en el continente son bajas en comparación con las de Estados Unidos, Europa y en especial Asia, donde el virus se originó, pero los expertos y fundaciones han advertido que el surgimiento del COVID-19 en el continente africano podría tener resultados catastróficos ante los frágiles sistemas de salud de varios países.
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“Desde el principio sabíamos que el continente estaba en riesgo”, sostuvo Stephen a The Associated Press. “La singularidad de África es el hecho de que tenemos una enorme población”.
La doctora añadió que los sistemas de salud del continente “lidian con muchas otras emergencias al mismo tiempo”, entre ellas el ébola.
