MOSCÚ (Sputnik) — Un total de 1.502 personas murieron en lo que va de año a causa de la fiebre del dengue en Filipinas, 427 más que el año pasado, informó el diario Philippine Daily Inquirer.
Para el 16 de noviembre, según datos actualizados, se detectaron 402.694 contagios lo que representa un aumento del 92% con respecto al año anterior.
El diario indica que las cifras del año en curso son las mayores de los últimos siete años: en 2016, el año récord anterior, se registraron 220.500 infectados y casi 1.100 muertos.
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El Gobierno declaró en agosto la epidemia a nivel nacional para hacer frente al brote, que se ha cebado especialmente con la infancia. La mayoría de los pacientes tienen entre cinco y nueve años.
Llamado a estar alerta
El dengue es una infección vírica presente en las zonas tropicales y subtropicales de todo el planeta. Es transmitida por la picadura de las hembras infectadas de mosquitos del género Aedes, sobre todo en áreas urbanas y semiurbanas.
La enfermedad suele manifestarse entre 3 y 14 días después de la picadura, con una fiebre alta (40Cº) que va acompañada de dos de los síntomas siguientes: dolor de cabeza muy intenso, dolor detrás de los globos oculares, dolores musculares y articulares, náuseas, vómitos, inflamación de ganglios linfáticos o sarpullido, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
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A pesar de que no hay tratamiento específico del dengue ni del dengue grave, que es una complicación potencialmente mortal, la detección oportuna y el acceso a la asistencia médica adecuada disminuyen las tasas de mortalidad por debajo del 1%.
El ministro de Sanidad, Francisco Duque, ha instado a la población a estar alerta y a eliminar los posibles focos de cría de mosquitos, a pesar de que el brote parece algo más contenido. Duque ha subrayado que la llegada de las lluvias puede revertir esta tendencia.
