Mujer australiana murió por tomar una ducha

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Una mujer del sur de Australia murió a causa de una intoxicación por monóxido de carbono, el gas letal emitido por un calentador de agua instalado en un baño, según ha informado una investigación.

El diputado forense David Whittle comenzó una investigación sobre la muerte de Heather Diane Pearce en la propiedad agrícola de su familia en Reedy Creek, al sureste de Adelaida , en enero del año pasado.

La señora Pearce había ido a la propiedad con su esposo y sus dos hijos para empezar a esquilar ovejas.

La mujer de 47 años fue encontrada inconsciente en el piso de un baño improvisado e independiente, creado a partir de un tanque de concreto convertido, después de ducharse.

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Primero se pensó que tenía problemas médicos, pero una autopsia confirmó la causa de la muerte.

Las pruebas en el calentador de agua descubrieron posteriormente que no cumplía con las regulaciones y que nunca deberían haberse instalado en el baño, dijo el miércoles a la investigación el abogado que ayudó a Ahura Kalali.

Era tan antigua que la marca y el modelo ya no se fabricaban.

El Sr. Kalali dijo que también se había colocado una placa de metal en la parte superior del calentador, bloqueando los gases de escape y que un ventilador rotatorio instalado en el techo del baño se había agarrotado y no giraba.

El inspector de gas principal Ron Jessen le dijo al forense que debido a la placa de metal, la acumulación de gases de combustión habría sido "casi instantánea".

Monóxido mortal 

Dijo que una prueba de 10 segundos que realizó en el calentador de agua arrojó una lectura de monóxido de carbono de 960 partes por millón.

Una lectura normal sería entre 40 y 150 partes por millón.

Jessen dijo que había que detener una segunda prueba porque estaba excediendo los niveles que sus instrumentos podían tomar.

"Sin duda, mostró que en muy poco tiempo este calentador se estaba convirtiendo en un generador de CO (monóxido de carbono)", dijo.

"Debería haber sido aislado y etiquetado como demasiado peligroso para operar".

El Sr. Kalali instó al Sr. Whittle a encontrar que la acumulación de monóxido de carbono fue la causa de la muerte de la Sra. Pearce.

También le pidió al juez forense adjunto que emitiera una advertencia pública sobre los peligros de los calentadores de agua instalados incorrectamente o que no cumplen con los requisitos, lo que, según él, planteaba un "peligro muy real".