China rechaza las uniones matrimoniales entre personas del mismo sexo. Este miércoles enfatizó que no seguirá el ejemplo de Taiwán sobre el matrimonio homosexual después de que las primeras uniones legales en Asia fueran vistas por los activistas como una revolución social para la región.
El Parlamento de Taiwán aprobó un proyecto de ley este mes que apoya el matrimonio entre personas del mismo sexo. Más de 360 parejas que se identifican como gays se casaron el viernes después de años de debate sobre la igualdad matrimonial, una medida que ha dividido a la isla.
Desde aquel día histórico la legislación defiende que las parejas del mismo sexo no solo podrán casarse sino que también pueden adoptar niños.
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China reclama que Taiwán forma parte de su propio territorio sagrado y muestra pocas señales de que el gobernante Partido Comunista legalice el matrimonio entre personas del mismo sexo, a pesar de la fuerte presión de los activistas por los derechos de la comunidad LGTB.
An Fengshan, portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán en China, ha señalado que China "estaba informada sobre registros en la isla" de matrimonios entre personas del mismo sexo. El continente tiene un sistema matrimonial de un hombre y una mujer", ha subrayado sin ofrecer más detalles.
En los últimos años, legisladores individuales han propuesto sin éxito leyes durante la reunión anual del Parlamento de China en marzo para legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo.
En China no hay leyes contra las relaciones entre personas del mismo sexo y, a pesar de la creciente conciencia de los problemas LGTB, la comunidad ha sido objetivo de censura en los últimos meses.
