Un total de 40 mil 614 personas han sido diagnosticadas con dengue desde el inicio del año en Filipinas, un aumento significativo en comparación con 2018, informó hoy el Departamento de Salud.
De acuerdo esa cartera, hasta el 2 de marzo se habían reportado 16 mil 383 casos más que en el mismo período del año pasado, lo que confirma la peligrosidad del brote.
"Realmente tenemos un problema con el dengue, estamos advirtiendo a la población para que tome precauciones", aseguró el subsecretario de salud, Eric Domingo, en una entrevista a la cadena GMA News.
En sus declaraciones, Domingo alertó sobre la situación y llamó a la ciudadanía a adoptar todas las medidas de cuidado necesarias.
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Los funcionarios de salud, citados por el medio local Rappler, instaron a la población a no almacenar agua por mucho tiempo, situación que se torna complicada debido reciente crisis por la escasez del líquido vital.
Las autoridades instaron al público a observar las mejores prácticas en el acopio de agua para evitar la reproducción de insectos portadores del dengue.
El dengue es una infección viral transmitida a humanos mediante la picadura del mosquito Aedes Aegypti, el mismo vector del zika, la fiebre amarilla o el chikungunya.
A finales de febrero pasado, también se confirmó en Filipinas la propagación de una epidemia de sarampión, que dejó cerca de 300 muertos, principalmente niños menores de cinco años que estaban sin vacunar.
Según datos oficiales del registro civil en esa nación del sudeste asiático, se observa una disminución en el número de infantes inmunizados debido a una aparente preocupación de los padres por el escándalo de Dengvaxia, una vacuna vinculada a la muerte de al menos 105 individuos.
Esta falta de prevención se ha traducido en un alarmante brote de enfermedades como el sarampión y el dengue.
