Una hondureña que se casó hace casi tres años con un hombre de las Islas Caimán fue condenada a dos meses de cárcel por el delito de bigamia.
Se trata de Kenia Yadira Alonzo Solís (29), quien según el diario Cayman News Service, contrajo matrimonio cuando todavía estaba casada con otro hombre con quien se había unido cuando tenía 16 años.
El medio de comunicación informó también que la mujer será deportada a Honduras al completar la sentencia.
Esta historia acaparó la atención de los medios locales cuando después de que Aric Brooks (28) el hombre con el que Alonzo Solís se casó ilegalmente, se quitó la vida hace algunas semanas.
“La corte escuchó que Solís vino a Caimán cuando ella tenía solo 14 años de edad con un pasaporte falso con un nombre diferente”, destaca La Tribuna.
Asimismo, se conoció que la mujer dijo que enfrentaba un peligro relacionado con pandillas en su país natal y que su familia la había ayudado a obtener los documentos de viaje falsos en 2003.
La mujer indicó que a los 16 años se casó con un hombre local, a quien acusó de ser violento y abusivo, pero lo dejó al año siguiente y regresó a Honduras.
Luego de un tiempo Solís regresó a la Isla Caimán bajo su verdadera identidad en el 2014 y poco después conoció a Brooks, con quien se casó en 2015.
Sin embargo el año pasado fue condenada por agredir a Brooks después de un altercado entre la pareja, cuando le rompió un vaso de vino en la cara.
Se entiende que poco después su matrimonio bíblico salió a la luz.
La corte escuchó cómo la revelación había llegado como una desagradable sorpresa para Brooks y le causó una gran angustia.
El juez dijo que Solís había engañado a Brooks, quien estaba enojado y molesto, de acuerdo con una declaración que había dado a la policía un tiempo antes de que trágicamente se quitara la vida.
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La historia había impresionado en la corte y el delito cobró importancia dado que las Islas Caimán son consideradas como una jurisdicción atractiva para las bodas de destino.
Las autoridades determinaron que este tipo de casos podrían poner a la isla en una “mala posición” siendo así que el fiscal le solicitó al juez que lo considere al imponer su sentencia.