China afirmó que combatirá los perjuicios de Estados Unidos hacia su actividad comercial pero aseguró que no busca una guerra económica con ese país.
China advirtió este domingo que tomará las medidas necesarias si Estados Unidos perjudica su actividad comercial, esto tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump sobre la imposición de un arancel de 25% sobre las importaciones de acero y 10% sobre las de aluminio.
El vocero del Parlamento chino, Zhang Yesui, informó sobre la posición de China y al mismo tiempo aseguró que el país asiático no quiere una guerra comercial con EE.UU.
El portavoz del Parlamento chino también afirmó que "las relaciones comerciales y económicas de EE.UU. y China son mutuamente ventajosas, han alcanzado tal nivel que el año pasado el intercambio comercial de los dos países llegó a los 580.000 millones de dólares, y es obvio que en este tipo de relaciones hay algunas diferencias".
"En mi opinión, las controversias comerciales pueden ser resueltas con la apertura mutua de los mercados; es necesario trabajar conjuntamente en la búsqueda de soluciones aceptables para ambas partes mediante el diálogo y la negociación", agregó.
China: Un "difícil" desafío para Estados Unidos
Desde el Centro de Estudios Internacionales y Estratégicos (CSIS, por su sigla en inglés) advirtieron que el modelo económico de China representa una "amenaza sin precedentes" para el sistema de comercio mundial y un "desafío" económico "sustancialmente difícil" para la nación norteamericana.
Por su parte, el ex alto consejero y jefe de estrategia del presidente Trump, Steve Bannon, aseguró que si Washington pierde la pugna comercial con Pekín nunca será capaz de recuperarse.
"Estamos en guerra económica con China y uno de los asumirá la hegemonía en 25 o 30 años: si seguimos por este camino, van a ser ellos", afirmó Bannon.