Moscú, 4 dic (EFE).- Más de 150 vuelos fueron cancelados o sufrieron retrasos en los aeropuertos de Moscú por una intensa nevada que comenzó ayer y continuará durante la jornada de hoy, según informó el Servicio de Hidrometeorología de Rusia (SHR).
El aeropuerto más afectado ha sido el de Sheremétievo, donde opera Aeroflot, la compañía aérea bandera de Rusia, que anunció la cancelación por mal tiempo de 30 vuelos programados para hoy, además de numerosos retrasos.
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En Domodiédovo, otra de las terminales aéreas de la capital rusa, se registraron retrasos en más de 70 llegadas debido a los trabajos para limpiar de nieve sus pistas.
Según el SHR, las nevadas, ya con menor intensidad, continuarán durante toda la semana y se acompañarán de un descenso de las temperaturas, que para el próximo viernes se esperan de 12 grados bajo cero.
Los meteorólogos advirtieron de que durante la jornada de hoy pueden caer hasta 9 milímetros de precipitaciones, lo que representa más del 15 % de la cantidad habitual para un mes de diciembre.
Las nevadas complicaron el tráfico en la capital rusa y obligaron al Ayuntamiento a movilizar más de 10.000 quitanieves y camiones para despejar las calles y aceras de la ciudad.
En contexto
Miles de palestinos y turistas se congregaron hoy en la plaza del Pesebrepara el encendido anual del enorme árbol con el que se inaugura oficialmente la Navidad en el lugar del planeta en el que, según la tradición cristiana, nació hace más de 2.000 años Jesús de Nazaret.
A la entrada en la plaza del Pesebre de Belén un cartel saluda a los visitantes: "Les damos la bienvenida a Belén como se la damos al Príncipe de la Paz. Rezad por la libertad de Palestina".
A lo largo de la tarde los visitantes y fieles fueron llegando a la plaza, donde se encuentra la iglesia de la Natividad y, frente a ella, un enorme árbol y un pesebre.
Frente a la iglesia, sobre el escenario construido para la ocasión, se siguieron algunas actuaciones musicales y discursos; la primera fue el himno palestino interpretado por los "scouts" de Belén y tras él un villancico ejecutado por los españoles Cristina Soler y Juanfe Pérez, invitados por la embajada española.
También se dirigió al público el alcalde de Belén, Anton Salman, y el primer ministro palestino, Rami Hamdala.
