Cerca de 22.000 profesores de primaria del estado de Kaduna, en el norte de Nigeria, serán despedidos tras no ser capaces de aprobar un examen diseñado para niños de seis años, informan medios locales.
Dos tercios de los 33.000 profesores que realizaron la prueba no la superaron, por lo que las autoridades regionales contratarán a 25.000 nuevos profesores "más jóvenes y más cualificados" para sustituirlos, explicó el gobernador de Kaduna, Nasir El-Rufai, en declaraciones recogidas por el diario Vanguard.
El-Rufai explicó que se les exigió a los profesores conseguir al menos un 75% de respuestas correctas en el examen para aprobar y culpó del mal resultado a la "politización de los procesos de contratación", que en su opinión ha provocado una "distribución asimétrica de profesores entre zonas urbanas y rurales", llevándose estas últimas a los maestros de menor nivel.
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La pobre situación de la educación en Nigeria, especialmente en las zonas del norte del país, se debe a la falta de financiación y al descuido de los sucesivos gobiernos nacionales para con las regiones más desfavorecidas.
Por ejemplo, Kaduna se encuentra en la zona norte de Nigeria, de mayoría musulmana, en la que la matriculación de los niños en las escuelas es mucho menor que en las áreas cristianas del sur.
Casi la mitad de los niños en edad escolar de Nigeria -unos 4,7 millones- no van a ningún colegio y las regiones del norte presentan las peores tasas de escolarización, especialmente entre las niñas, según datos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Los pobres datos de escolarización de las regiones del norte de Nigeria pueden explicarse debido al conflicto con la organización terrorista Boko Haram pues en el estado de Borno (noreste), más de la mitad de las escuelas permanecen cerradas.
En un informe publicado el pasado septiembre, Unicef denunció que, desde 2009, casi 2.300 profesores han sido asesinados en el noreste del país, y otros 19.000 se han visto obligados a desplazarse, un dato que se une a las cerca de 1.400 escuelas destruidas en el conflicto.