Más de dos millones de musulmanes llegados de todo el mundo empiezan este miércoles la peregrinación a la Meca, un rito con varias etapas que se desarrolla en el lugar más sagrado para el islam.
"Cada vez, surgen nuevas emociones", cuenta Tidjani Traore, un funcionario de Benín de 53 años, que se prepara para su 22ª peregrinación. "Hay innovaciones en la organización y el albergue de los peregrinos. Ahora, por ejemplo, las tiendas tienen aire acondicionado", señala.
Este año volverán a La Meca los peregrinos iraníes, que no viajaron en 2016 tras la ruptura de relaciones entre la república islámica y el reino saudita.
Este año el hach, uno de los cinco pilares del islam, se produce en un momento de grave crisis entre los países del Golfo y bajo la amenaza del grupo yihadista Estado Islámico, acechado en Irak y Siria.
Las autoridades sauditas se han movilizado para evitar que se repita la tragedia de 2015, cuando una estampida dejó casi 2.300 muertos, incluyendo 464 iraníes.
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Después de la tragedia, Irán criticó duramente a Arabia Saudita por la organización de la peregrinación.
En enero de 2016, ambos países rompieron sus relaciones diplomáticas. La decisión la tomó Riad tras el ataque a su embajada en Teherán por manifestantes que protestaban contra la ejecución en Arabia Saudita de un dignatario religioso chiita.
El peregrinaje se produce en un momento de crisis entre Arabia Saudita y sus aliados y Catar, a quien el reino acusa de apoyar el "terrorismo" y de ser demasiado cercano a Irán.
Desde el 5 de junio pasado, Catar vive aislado y bajo un duro embargo.
El bloqueo complica el peregrinaje de los cataríes, pero la semana pasada los saudíes anunciaron que la frontera quedaría abierta para los fieles que quieran ir a La Meca y que aviones sauditas iban a ser enviados a Doha para transportarlos.
Por otra parte el EI ha perdido en los últimos meses grandes extensiones de territorio en Irak y en Siria, pero sigue reivindicado ataques en Medio Oriente y Europa. Las autoridades sauditas afirman que están preparadas para esta amenaza.
El portavoz del ministerio del Interior, el general Mansur al Turki dijo que hay más de 100.000 efectivos de seguridad movilizados para el itinerario del "hach".