Un hombre murió en las primeras horas del jueves (hora local) después de que un atacante suicida se hizo explotar en un control de seguridad de Hamas en el sur de la Franja de Gaza, una forma de violencia muy inusual contra el grupo palestino.
"Temprano esta mañana, las fuerzas de seguridad detuvieron a dos personas que se acercaban a la frontera sur (que limita con Egipto)", dijo un portavoz del ministerio del Interior que rige en el enclave controlado por el grupo islamista Hamas.
"Uno de ellos se hizo explotar, murió en el acto hiriendo al otro y a varios agentes de seguridad", agregó el comunicado.
En el texto el portavoz indicó que los heridos habían sido trasladados al hospital para ser tratados.
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Una fuente médica informó que un miembro del equipo de seguridad de Hamas murió en el ataque.
Según testigos, cientos de efectivos fueron movilizados a la frontera después del incidente que afectó a una zona cercana a la frontera sur, que limita con Egipto.
Fuentes de las fuerzas de seguridad de Gaza indicaron que creen que el autor del ataque es un islamista radical.
El grupo islamista Hamas ha gobernado desde hace una década el enclave pero otros grupos más radicales lo critican.
Últimamente Hamas ha reforzado su frontera con Egipto para mejorar sus relaciones con El Cairo.
Israel, el único otro país que tiene fronteras con Gaza, mantiene un bloqueo a la zona y sostiene que esta estrategia es necesaria para aislar a Gaza.
En contexto
Descubren en un pueblo afgano 4 fosas con 55 cadáveres de la minoría hazara
Las autoridades afganas descubrieron cuatro fosas comunes con 55 cadáveres, todos ellos miembros de la minoría chií hazara, en un pueblo en el norte del país liberado hace dos días tras permanecer una semana bajo control de los insurgentes.
"Se han descubierto cuatro fosas comunes en el valle de Mirza-Walang (…) en las que se encontraron 55 cadáveres", explicó hoy a Efe Zabihullah Amami, portavoz del gobernador de la provincia de Sar-e-Pol, donde se encuentra el pueblo.
Según el portavoz, el descubrimiento de las fosas se produjo ayer, un día después de que las tropas afganas recuperaran el control del pueblo tras una serie de operaciones terrestres y aéreas que causaron la muerte de al menos un centenar de insurgentes.
En una de las fosas, indicó Amani, encontraron 23 cuerpos, entre ellos tres niños de "ocho, doce y quince años", y en otra de ellas hallaron una decena de cadáveres.
"Todos los cuerpos descubiertos eran de hazaras", subrayó el portavoz del gobernador provincial.
La minoría chií hazara ha sido objetivo frecuente de atentados y asesinatos selectivos en Afganistán, sobre todo del grupo yihadista Estado Islámico (EI), que reivindicó ataques contra esta comunidad como el de julio del año pasado contra una manifestación en Kabul, que causó 85 muertos y 400 heridos.
